Cuando las estrellas patrullaron con Crockett y Tubbs: los cameos de ‘Corrupción en Miami’

En la década de los 80, los detectives Crockett y Tubbs patrullaban por South Beach en Miami en un Ferrari Daytona blanco y en un Cadillac descapotable. El dúo, interpretado por Don Johnson y Philip Michael Thomas, tenía un objetivo claro: limpiar las calles de criminales. Sus hazañas las seguía medio mundo en Miami vice, aquí Corrupción en Miami. En aquel momento, la ciudad distaba mucho de ser el centro turístico que es hoy en día; abundaba la pobreza, la criminalidad y el narcotráfico. Y Corrupción en Miami, con cinco temporadas y un total de 111 capítulos, fue capaz de cambiar el rumbo de la ciudad y de innovar el estilo de las seriesde televisión de la época.

Y es que la serie estaba pensada para atrapar a la audiencia de MTV en una época en la que los videoclips de música se habían puesto de moda, por lo que el equipo puso todos sus esfuerzos en que las imágenes, emociones y energía fuesen impecables. Antes de empezar con el rodaje, el equipo pintó las fachadas de varios edificios de la zona por el deterioro reviviendo la arquitectura Art Déco de la ciudad. Además de convertir South Beach en una de las zonas más populares del sur de Florida, mejoraron el aspecto de otras zonas de rodaje como Broward o Palm Beach. Aparte de llamar la atención con sus coches, Crockett y Tubbs marcaron un estilo de moda: la camiseta debajo de una chaqueta Armani. Eso, las piernas abiertas, una mano en el bolsillo y una mirada chula y desafiante. Vittorio Ricci, Versace y Hugo Boss vistieron a los detectives.

Lo de la música fue otro rollo. En lugar de ambientar las escenas con música compuesta específicamente para series de televisión, había un presupuesto de 10 mil euros por capítulo para comprar los derechos de canciones originales. El compositor Jan Hammer compuso varias canciones para la serie (Crocketts´ Theme o Tubbs and Valerie), además de la principal, Miami Vice Theme, con la que ganó el Grammy en 1986.

Paseo de estrellas

Llegados a este punto, todos los actores emergentes, y no tan emergentes, querían pasear por las calles criminales de Miami. El número de actores, ahora estrellas, que hicieron cameos en su juventud es incontable. En 1988, con solo 20 años, Julia Roberts apareció en un capítulo de la cuarta temporada y, dos años después, llegaría su éxito Pretty Woman. Roberts no fue la única ganadora de Óscar que pisó Miami. Chris Cooper, que lo ganaría en 2003 por Adaptation, se metería en el papel de policía corrupto. Liam Neeson también apareció por allí en la tercera temporada interpretando a un terrorista.

Bruce Willis cuando ya rozaba la treintena interpretó a un traficante de armas y, cuatro meses después, él se convertiría en detective en Luz de luna, serie con la que obtuvo un Emmy y un Globo de Oro. Viggo Mortensen (al que le vendrían éxitos como El señor de los anillos, Green Book o Alatriste) y un joven Benicio del Toro de 20 años también aparecerían. Phil Collins, cantante que lideró la lista de éxitos Bilboard Hot 100, no solo compuso canciones para la serie (Long long way to go o Take me home), sino que también interpretó a un estafador de traficantes de cocaína.

Otra sorpresa fue Melanie Griffith que participó en la tercera temporada cuando ya se había casado y divorciado de Don Johnson en la década de los 70. En los 90 volvería a casarse y divorciarse del actor de la serie. Otros rostros que desfilaron por Miami fueron Oliver Platt, Barbra Streisand, Frank Stallone o Laurence Fishburn, entre muchos.