bilbao - Finalmente fue Alexander Kristoff (Katusha) quien logró romper la racha de triunfos de Peter Sagan (Tinkoff) en la Vuelta a Suiza. El velocista noruego aprovechó el excelente trabajo de su equipo para lograr su décimo séptima victoria en la presente temporada. Ocurrió en una etapa en el que la escapada estuvo a punto de dar la sorpresa y llegar a buen puerto. Se creó una fuga de categoría, encabezada por el campeón del mundo, Michal Kwiatkowski (Etixx). Al polaco le acompañaron Daryl Impey (Orica), Silvan Dillier (BMC) y Axel Domont (AG2R). La escapada, con una diferencia inferior al minuto, logró mantener el pulso hasta los últimos metros de la etapa, cuando se resolvió en un asunto de velocistas, en el duelo entre Sagan y Kristoff.
Kwiatkowski, irreductible, demostró que llega en buena forma al Tour y que en su vocabulario no existe la palabra rendición. El maillot arcoíris se exprimió hasta el final y cuando la fuga parecía acabada arrancó en solitario, obligando al tren del Katusha a esforzarse hasta la extenuación para lograr darle caza a 500 metros de meta. Todo hacía prever que Sagan podía continuar con su idilio con la ronda helvética, pero no contó con la presencia de José Joaquín Rojas. El murciano del Movistar se coló entre Sagan y Kristoff cuando se lanzaba el sprint. Rojas pagó la dureza del repecho final, sus piernas se apagaron, y perdió la rueda del noruego. El aire que dejó al descubierto Rojas, dejó sin opciones a Sagan, al que le faltó una rueda para poder remontar al velocista del Katusha, que ganó por media.
En la general, el joven francés Thibaut Pinot (FDJ) sigue de amarillo. No obstante, el galo vio como se le complica la victoria final tras ceder cinco segundos con el británico Geraint Thomas (Sky). A falta de las dos jornadas -hoy un circuito y mañana la contrarreloj final-, la diferencia es de 37 segundos. Pinot, inferior a Thomas en la lucha individual contrarreloj, deberá defender esa renta en una crono de 38,4 kilómetros. - M. G.