bilbao. En la fotografía que perdurará más allá de su propia existencia, el momento de su vida, está David López levantando el puño derecho mientras sonríe celebrando un éxito que no es suyo, o no, al menos, directamente, sino de Chris Froome, el ganador del Tour a quien el vizcaino pasa el otro brazo por su espalda amarilla. La felicidad de López cuando París está a punto de arder en otro atardecer de verano es completa, la máxima, seguramente, que puede alcanzar un ciclista cuya satisfacción depende de que ganen o pierdan los demás, sus jefes, así que de lo primero que dice cuando se baja de la bicicleta en los Campos Elíseos es que siente el gozo liberador del deber cumplido. "Todos nos hemos sacrificado mucho y hemos dejado muchas cosas de lado para que pase esto", explica su felicidad, "así que aunque mi papel es el de ayudar, también he contribuido al triunfo". El palmarés de los buenos gregarios está hecho de pedacitos de victorias. López tiene un poquito de aquella Vuelta que Valverde le ganó a Samuel en 2009, otras tantas de las victorias del murciano en su etapa en el Caisse d'Epargne y el Movistar, y, desde este año, algunos de los éxitos más relevantes del Sky, como la París-Niza de Porte o, por supuesto, el Tour de la foto con Froome en los Campos Elíseos. Esas son sus victorias. De las otras, de las propias, sabe muy de vez en cuando: en el verano de 2007 cuando ganó la etapa reina de la Vuelta a Alemania, tres años después en la Vuelta a España y otros tres más tarde, ayer, en la etapa del Eneco Tour que acababa en la cima de La Redoute, donde el vizcaino soltó en los metros finales a Stybar, Paterski, Dumoulin y Bakelants, los mejores del día que iluminó a López como ocurre cada tres años desde 2007.

Su victoria, la tercera de su carrera, fue de las que alegran a todo el mundo. Dicen que son más bonitos los triunfos de los gregarios y la razón la resumió ayer en dos renglones Servais Knaven, director del Sky en el Eneco Tour, que dijo que era fantástico que ganase alguien que siempre está ayudando a los demás.

El Eneco Tour disputa hoy su última etapa con Tom Dumolin defendiendo ocho segundos de ventaja sobre Stybar.

Estévez, en Laudio Naturgas Energía logró la victoria en Laudio, prueba puntuable para el Euskaldun, por medio de Imanol Estévez, que se impuso a Beñat Txoperana y a Marcos Jurado.

En la Vuelta a Portugal, Marque ganó la crono y es el nuevo líder.