Froome sentencia y cede la etapa a Simon Spilak

bilbao. Cuando Christopher Froome se vio sin compañeros de equipo, encontró en Simon Spilak, su máximo rival, a su mejor aliado. La etapa reina del Tour de Romandía, envuelta en unas duras condiciones climatológicas, se le atragantó al poderoso Sky, que dejó al líder de la carrera solo ante el peligro. Pero a la hora de la verdad el británico supo jugar sus bazas, colaboró con el ciclista del Katusha y dejó sentenciada la general de la carrera suiza. El peaje que tuvo que pagar fue asumible: la etapa fue para Spilak.

La nieve hizo que los organizadores renunciasen al Col de la Croix y lo sustituyeron por Les Mosses, mucho más suave, a 8 kilómetros de la meta. Para entonces, desde lejos, fueron muchos los que intentaron probar suerte con diversas escapadas, entre ellos Mikel Landa, Juanma Garate y Garikoitz Bravo, quien defendía el maillot de la montaña pero tuvo que conformarse con el segundo puesto de dicha clasificación.

Froome, que se había quedado sin equipo en el último ascenso, sacó fuerzas para atacar y salir en busca de Spilak, que había saltado con anterioridad. Una vez que le dio caza, los dos se entendieron bien y dieron relevos para huir del grupo de los favoritos, donde estaba Valverde y donde nadie quiso trabajar. Con este panorama, el dúo consiguió aumentar la distancia hasta la misma meta, donde Froome no le disputó la victoria a Spilak, sabiendo que tiene en el bolsillo la general que se cierra hoy con una contrarreloj de 19 kilómetros.

el lokosphinx gana en araba El equipo ruso Lokosphinx logró ayer la victoria en la primera jornada de los Dos Días de Álava, disputada con una contrarreloj por equipos entre Oion y Labastida sobre 36 kilómetros. Los rusos mostraron su mejor adaptación a esta disciplina que el resto de rivales y así lo han reflejado en la línea de meta, donde ha aventajado en 44 segundos a Caja Rural y en un minuto y 21 segundos al Lizarte.

La segunda jornada alavesa será una prueba en línea, de 118 kilómetros, con salida y llegada en Gasteiz y cuenta con el alto de Vitoria como principal dificultad orográfica, al que deberán realizar tres ascensiones.