Samuel no se descarta

Lieja. Para recuperarse de la "terrorífica", como la define, Vuelta al País Vasco que "me dejó machacado", Samuel Sánchez tuvo que empeñarse a fondo: "Estuve tres días prácticamente sin entrenar y luego me fui a Almería ocho días". A trabajar el cuerpo pero sobre todo "para quitar la humedad de las mojaduras" de la Itzulia. Y de ahí a la Decana, que hoy le espera con 17 días de competición y la mente puesta en el Giro de Italia por el que ha hipotecado toda la primera parte de la temporada, "pero nadie descarta una Lieja", rebate. "Si estoy aquí es porque quiero ver cómo estoy y si la preparación va bien, pero si tengo una oportunidad de disputar la aprovecharé".

Sin la Roche aux Faucons, la Lieja será menos dura pero "la velocidad es la que manda y si se va rápido será selectiva. En la Redoute se puede ir un grupo de quince corredores y serán los que lleguen a meta". Opina Samuel que "lo que este recorrido da es más juego a los segundos espadas". Nombra a Dani Moreno o a Van Avermaet. Y a Igor Antón. "Tendrá su oportunidad. Si hay un grupito en la Redoute que se va, él se tiene que mover porque en un grupo de diez no es rápido y no va a tener opciones, va a ser una alternativa desde lejos".

Analiza Samuel en Igor una incógnita. Así le ve. "Es un corredor que te puede andar bien en Flecha y fallar en la Lieja. Su mejor resultado ha sido en el GP Miguel Indurain y en la Flecha. Vamos a ver si hoy lo refrenda y está delante porque el equipo lo necesita", apela. "Yo por mi parte me conformo, o por lo menos espero, estar bastante delante y ver que las fuerzas responden en una carrera de más de 200 kilómetros porque en el Giro va a haber esfuerzos de este tipo. Y si puedo estar en la pelea, ¿por qué no? En todas mis participaciones he estado delante y si estás siempre rondando?".