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El callejón de las botxerías

Concluye en Yimby la II Bilbao Whisky Topaketa

La cita convierte al Botxo en referencia internacional del scotch por unos días

En imágenes: concluye en Yimby la II Bilbao Whisky TopaketaOskar González

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Resulta que en el mundo del whisky hay destilerías-boutique. O sea, de producción corta pero muy cuidada. Muchas de ellas se encontraban en los 19 stands que llenan el interior de uno de los salones de Yimby Ercilla hasta hoy tarde con motivo de la segunda Bilbao Whisky Topaketa. Y, además, el bilbaino con kilt Manu Iturregi, Juan Valls, Rafa Hernández, Enma Briones y el podcaster del whisky Roger Rueda, lo acompañan con catas, masterclass, muestras y talleres. Como el que impartía Santi Ortiz sobre el hielo.

Con la presencia de Rocco Caira, cónsul honorario de Irlanda en Bilbao; el director de Política e Industrias Alimentarias del Gobierno vasco, Iker Iglesias; y Josu Garaialde, de Hazi, el evento premió al artesano granadino del whisky Fran Peregrina; al tonelero cordobés Rafa Cabello, distinguido en Londres como mejor del mundo, que usa madera de roble y la envina con sherry; y a Felipe Schrieberg, escritor y músico, además de personaje del scotch. Brindaron con sus vasos de whisky tipo glencairn. Los fetén para este licor.

Acudieron el bartender Giuseppe Baldi; el sumiller de Boroa, Alberto Izquierdo; su colega, Manuel Cla; y el coctelero Javier Rodríguez. Diego Remírez de Ganuza y Ane Sesmillo, de Basque Moonshiners, charlaban con los irlandeses Moira y James Doherty, de la destilería Sliabh Liag. Asier y Miguel Díez representaban a Browm Forman; Javier Blanco, de Picos de Cabariezo presumía de usar alquitara. Estaban Jay Venakki, Lisa He, Manuel López, la nueva destilera asturiana Lara Calderón o Steven David, de MH, que elabora el que fue elegido mejor single malt del mundo hace dos años.