COMO dijo Gabriel García Márquez el periodismo fue, en tiempos de Gabo, “el oficio más hermoso del mundo”. Hoy está mal mirado y con desprestigio, como si el pueblo no quisiese escuchar la verdad sino su verdad; como si el pueblo no quisiese escuchar “al dictado de...”. Pero sigue siendo hermoso si uno pudiese esquivar las barricadas siempre.

Permítanme una historia breve. Julius Fucík fue un periodista checo que militó en el Partido Comunista y fue apresado por los nazis. Antes de morir en la horca, escribió Reportaje al pie del patíbulo. Un canto a la vida en medio de tanta muerte. Las páginas de este libro fueron escritas de manera clandestina en la cárcel de Pánkrac, durante la primavera de 1943. Fue capturado por la Gestapo y decidió dejar rastros de vida camino de la muerte. El 25 de agosto de 1943, un tribunal en Berlín condenó a muerte a Julius Fucík. Lo ahorcaron quince días después, el 8 de septiembre, hace 80 años. Esa fecha honra hoy el periodismo.

Ayer la recordaba cuando Xabier Euzkitze y Azur Tejerina inauguraron la gala de entrega de los premios del Periodismo Vasco 2023 por la Asociación y el Colegio Vasco de Periodistas bajo el mandato y la vigilancia de Amaia Goikoetxea y Amaia Fano. Silvia Intxaurrondo, que presenta en TVE el programa matinal La hora de La 1, recibió el premio Periodistas Vascos 2023 por la proyección de su trabajo, mientras que Jordi Évole fue distinguido con el galardón José María Portell a la Libertad de Expresión, tras su trabajo No me llame Ternera, una entrevista con Josu Urrutikoetxea. Entre los premiados se encontraban Martxelo Otamendi, exdirector de los diarios Egunkaria y Berria, y decano de los directores de la prensa escrita en España, quien recibió el premio a su Trayectoria Profesional. Radio Bilbao-Cadena SER, con Begoña Marañón al frente, en su 90 aniversario, en la categoría de Personaje o Institución Social; la Plataforma PRIMERAN de EITB, con Alex Gibelalde al frente, como Periodismo Digital; Marivi Ibarrola, fotoperiodista, e Iñaki Petxarroman, quien recibió el de Periodismo Medioambiental. El premio honorífico fue para los fallecidos Antonio Álvarez Solis y Yolanda Alicia.

La Sala BBK, donde todo ocurrió, estaba abarrotada. A la cita no faltaron el lehendakari Juan José Ibarretxe, Bakartxo Tejeria, Ana Otadui; el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto; el consejero Bingen Zupiria; el director general de BBK, Gorka Martínez; el Ararteko, Manuel Lezertua, Arnaldo Otegi, Eneko Andueza, la viceconsejera Idoia Mendia, Tono Álvarez Solís, Jon Picaza, Joseba Rekondo, Amatiño, Juan Gondra, Begoña Beristain, Carmen Peñafiel, Carmen Torres Ripa, Verónica Portell, Jon Bilbao, Yolanda Díaz, La Otxoa, Jesús Castroviejo, Arturo Tueba, Montxo Urraburu, Txuskan Koteron, Nica Cuenca, José Mari Amantes y otra gente informada e informante.