HAY vida más allá del Tour. Bilbao La Vieja fue ayer buena muestra de ello. Coincidiendo en la hora con el macroespectáculo global de la presentación de los equipos ciclistas, y solo en los primeros 250 metros de la calle Urazurrutia, se celebraban tres eventos. A saber: un concierto de jazz en la sala JazzOn, una inauguración en Bilbao Arte y la fiesta de apertura de una exposición de fotos en la planta baja de BBK Kuna.
Se trataba esta última de la reciente edición de Retratos de un barrio. La iniciativa nació en plena pandemia y, apoyada por la Asociación de Comerciantes de San Francisco, Bilbao La Vieja y Zabala, además de Bilbao Historiko y el Ayuntamiento, la fotógrafa Begoña Elexpe sigue a lo suyo: captar la vida y la energía de las gentes del barrio. O, como esta vez, personajes populares o conocidos situados en el contexto de comercios del barrio. Son 42 retratazos llenos de alma. Y con un punto onírico que tiene algo de Ouka Lele y mucho talento propio.
A pesar del Tour y la lluvia, el recinto se puso de bote en bote. Se dieron cita buena parte de las y los modelos. Caso de las actrices Itziar Lazkano, acompañada por el dramaturgo Felipe Loza; Nati Ortiz de Zárate; e Ylenia Baglietto; el director de cine Pedro Olea, el artista José Antonio Nielfa La Otxoa; el ilustrador Tomás Ondarra; el periodista Xabier Lapitz; músicos como Aiora Renteria e Iñaki Imaz, de Zea Mays; o Goraitz Dutto, de Moonshine Wagon; la exfutbolista, Ainhoa Tirapu; el cocinero, empresario y expresidente del Athletic Club, Aitor Elizegi, con Aitziber Lekerika; el rapero Betto Snay; el presidente de la asociación Nevipen, Tito Borja; el dinamizador de bilbainías, José Mari Amantes; o la estrella televisiva Joseba Solozabal.
Acudio el presidente de Bilbao Dendak, Rafael Gardeazabal, así como la presidenta de Deusto Bizirik, Julia Diéguez, en compañía de Julio Aristín; o el presidente de Bilbao Historiko, Borja Elorza.
Orgulloso de la iniciativa se mostraba el presidente de la Asociación de Comerciantes de San Francisco, Bilbao La Vieja y Zabala, Miguel Ángel Guantes. “Poco a poco salen cosas; el barrio va a más, aunque nos falta dar algún que otro paso”, dijo.
Estuvo en la inauguración el impulsor de mil iniciativas botxeras, Marino Montero, junto a José Félix Artetxe, conductor y responsable del mantenimiento del último Azulito que aún pistonea.
No faltó la gerente de la asociación organizadora, Begoña Castaño; ni Iker Urkidi, de Bilbao Historiko; o Conchi Delgado, legendaria guardiana del Convento. Lo mismo cabe decir de Janire Román y Karina Perla, de Estudio 14; Fatou Dieng, de Kes Fatou; o de Sandra Santos, Leire Prats, Moisés San Pelayo, Asunción Gallego y Brígida Ridruejo.
Tras los discursos corrieron bandejas de pinchos y copas de txakoli. Sonó en vivo la mezcla de folk y heavy eléctrico de Moonshine Wagon. El Tour quedaba muy lejos.