PERMÍTEME la licencia, Daniel: Carmelo Bernaola era un enamorado de Mozart. Tratándose del gran compositor vasco, hace falta una matización: el Mozart de fútbol para él era Txetxu Rojo, su gran pasión rojiblanca, lo que es mucho decir si se tiene en cuenta que hablamos del compositor del actual himno del Athletic. Metidos ya en harina de actualidad, diremos que Daniel es el escritor Daniel Moro, autor del libro El compositor Carmelo Bernaola (1929-2002): una trayectoria en la vanguardia musical española, publicado en noviembre de 2019, quien ayer ofreció una conferencia en la Biblioteca foral en la que, como en su obra, analizó la vida y trabajo de uno de los compositores contemporáneos más importantes de Euskadi.

El director general de Cultura de la Diputación Foral de Bizkaia, Andoni Iturbe, abrió la conferencia con su presentación. Fue el pistoletazo de salida en presencia de Jon Astigarraga, concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Otxandio, tierra natal del compositor; Jon Zarate, vicerrector de Euskera y Formación de UPV/EHU; Jon Bagüés, director de Eresbil, Archivo Vasco de Música, e Itziar Larrinaga, profesora y coordinadora de investigación en Musikene. Ellos y ellas confesaban una entregada admiración al compositor vasco.

En su charla, Daniel Moro profundizó en la relación entre Bernaola y Bizkaia, tierra que amó por encima de cualquier otra. Detalló cómo Bernaola, autor de numerosas obras destinadas a la sala de conciertos y de más de un centenar de bandas sonoras para cine y televisión, fue uno de los compositores más representativos de la Generación del 5 en la que militaron, además de él, Ángel Arteaga, Claudio Prieto, Agustín Gónzalez Acilu, Agustín Bertoméu, Manuel Moreno-Buendía, Antón García Abril, Cristóbal Halffter, Manuel Blancafort, Manuel Carra, Luis de Pablo y Fernando Ember entre otros. Casi nada.

pasión viva A Carmelo se le conoció, quienes lo hicieron de cerca, como un hombre apasionado. Una pasión viva. Algo de eso se contó ayer. Testigos de ello fueron Paula Sánchez, Charo del Campo Olaso, Sua Bengoa, Alejandro Fernández, Juan José Rodríguez, emisario de la editorial del libro de Daniel; Nerea Ruiz, la compositora y profesora Baikune de Alba, Javier Arteaga, María José Idigoras, María Luisa Iriondo, José María Hernández, Marga Fradua, Clara Cordera, Adela Suárez, Esperanza Pardo y Sagrario Rodríguez entre otros.

Cuenta la historia que después de sufrir los primeros bombardeos durante la Guerra Civil, cuando tenía ocho años, la familia de Carmelo se trasladó a Medina de Pomar. Desde allí comenzó su carrera. Fue llamado el músico culto. En 1981 Bernaola es nombrado director de la Escuela Superior de Música Jesús Guridi de Vitoria-Gasteiz, con lo cual retorna a Euskadi. Donde quería.