A finales del pasado año, un nuevo desprendimiento en la ladera de Lafita de Bakio obligó a cortar el paso de acceso al muelle. El pasado viernes, día 26, el Ayuntamiento habilitó un carril para que los vecinos de la zona de Portugane puedan realizar labores de "carga y descarga" en horario de 9.00 a 12.00 y de 15.00 a 18.00 horas. Una medida adoptada ahora por el Consistorio "visto que en las próximas semanas" va a haber un "tiempo estable", según explica la alcaldesa, Amets Jauregizar, a través de un bando municipal.

Una actuación que el grupo municipal del PNV en la localidad considera que se ha demorado en el tiempo. En este sentido, los jeltzales explican que han pasado "tres meses desde que se produjo el cierre" y que durante este periodo los vecinos han estado sin poder "meter el coche ni las compras o acercar a la gente mayor". "Aunque el paseo seguía abierto para paseantes y turistas, ellos estaban sin acceso", lamentan.

En este sentido, señalan que "la situación de la ladera, no es nueva", sino que "desde hace años" hay "continuos desprendimientos". "Hace unos 18 meses también cayó una enorme piedra y se limitaron a poner unas vallas para que la gente no aparcara, pero el Ayuntamiento no hizo nada más para solucionar esta situación tan grave", censuran.

Por todo ello, explican que "desde el pasado mes de febrero, alertados por los vecinos de Portugane", insistieron "hasta en tres comisiones informativas para intervenir en el problema y dar alguna solución a los vecinos de la zona". "Siendo el punto más transitado de Bakio es incomprensible que no se hiciera nada en tantos meses", subrayan. A su juicio, la "proximidad de la Semana Santa y meses de insistencia" han forzado ahora la apertura parcial de la calle. "El equipo de gobierno de EH Bildu querrá quedar como un Ayuntamiento sensible y cercano a la vecindad, pero nada más lejos de la verdad", afirman. Al mismo tiempo, a pesar de que son conscientes de que "la reparación definitiva será complicada", cuestionan si "¿no se podía haber hecho algo más ya hace 18 meses cuando el primer aviso?".

Por su parte, el Consistorio bakiotarra señala que será "la Policía municipal la encargada de supervisar que no existan más desprendimientos y que la ladera sigue estable". Asimismo, apuntan que "si existiera algún movimiento de tierra, el Ayuntamiento volverá a cerrar el paso por seguridad". Por último afirman que están "mediando en la búsqueda de la solución que facilite ejecutar las obras de estabilización de la ladera" mientras esperan a que "Costas autorice el acceso en su terreno para acometer las obras".