Loiu quiere echar una mano al sector hostelero que, debido a la crisis sanitaria, se vio obligado a bajar la persiana durante dos meses y que, actualmente, tiene que llevar a cabo unas estrictas medidas de higiene y desinfección. Por este motivo, el Ayuntamiento anunció que no cobrará este año ni el próximo la tasa de terrazas. De este modo, el Consistorio eximirá del pago de este tributo a la hostelería del municipio que ha visto cómo las terrazas se han convertido en los últimos tiempos en un elemento indispensable para sus negocios.

La iniciativa adoptada por el equipo de gobierno municipal pretende “dar un pequeño impulso al maltrecho tejido hostelero en estos tiempos tan delicados”, señalan fuentes municipales. Así, para hacer realidad esta exención puntual, ha sido necesario realizar una modificación en la ordenanza fiscal municipal. “En esta modificación aprobada se recoge que dicha tasa no se cobrará y si, en principio, todo marchase con normalidad, podría recuperar para el ejercicio 2022”, apuntan desde el Consistorio.

No obstante, esta no es la primera ayuda que ofrece el Ayuntamiento al sector hostelero. Como primera respuesta a la crisis generada por el covid-19, el Consistorio puso en marcha una línea de ayudas al comercio, hostelería y autónomos dotada con 1.000 euros a cada establecimiento. Además, permitió que aquellos locales que no tuviesen espacio para terraza pudiesen colocarlas en plazas y espacios públicos contiguos. Asimismo, en septiembre dará comienzo la campaña BonoLoius, que permitirán poder realizar un gasto de 30 euros por el precio de 20.