EL folclore vasco tomó el sábado el Amurrio Antzokia durante la gala de entrega del galardón Guk de Oro al grupo Aiara Dantza Taldea por sus 35 años de incansable trabajo en la preservación y transmisión de un aspecto vital de la cultura y la tradición de Euskal Herria y de la propia villa como son las danzas. “En un mundo tan globalizado como en el que estamos, es importante no perder la fuerza de lo propio, es decir, nuestro idioma y nuestras costumbres. La cultura vasca tiene registros y formas diferentes de manifestarse. Una de ellas es el baile. Buen ejemplo de ello es Aiara Dantza Taldea que, además, a lo largo de sus 35 años de historia, ha contribuido a difundir el nombre de Amurrio de forma positiva fuera de los 96 kilómetros cuadrados de nuestro término municipal. Por todo ello, y por su 35 aniversario, la agrupación es digna merecedora del Guk de Oro”, justificó la alcaldesa de la localidad, Josune Irabien, ante un teatro abarrotado de público.

Y la formación de danzas agradeció el reconocimiento con lo mejor que sabe hacer: bailando. Los 120 integrantes de Aiara Dantza Taldea -de entre 5 y 75 años- pasaron por grupos por el escenario del Amurrio Antzokia para ofrecer un variado y sencillo repertorio de folclore tradicional que se llevó una gran ovación e incluso el improvisado y emocionado grito de irrintzis por parte de varios espectadores.

Justo antes de la pequeña actuación, la presidenta de la agrupación, Iraia Aspuru, acompañada de las integrantes de la Junta Directiva, subió al estrado y comenzó su interlocución recordando los inicios del grupo. “Fue en las fiestas de 1983 cuando se vio la necesidad de crear una formación de danzas en Amurrio ante la desaparición de las dos que habían existido antes”. Para arrancar la andadura “vinieron dos profesoras de la Federación de Danzas de Bizkaia” que, una vez afianzado el proyecto, obtuvieron el relevo por parte de jóvenes integrantes de Aiara Dantza Taldea. Iraia Aspuru tuvo palabras de agradecimiento hacia “los padres y madres que se encargaron de realizar los trajes y el material a mano”. Su apoyo en los orígenes de la formación fue muy importante “y lo sigue siendo para que proyecto continúe hacia adelante”, afirmó.

En la actualidad, las siete mujeres que conforman la junta directiva de Aiara Dantza Taldea cuentan con la ayuda de otras cuatro monitoras que imparten clases a doce grupos de diferentes edades y niveles en un gimnasio municipal “al que le vendría bien un cambio de suelo porque está muy mal”, apostilló Aspuru con una sonrisa aprovechando la presencia en la gala de representantes políticos del Consistorio.

Al margen de esta necesaria reivindicación, el mensaje de Aiara Dantza Taldea fue de agradecimiento hacia quienes han formado y forman parte de la agrupación “los voluntarios y el numeroso público que nos arropa en nuestras actuaciones”.

Futuro pregón La gala se cerró con la entrega a Aiara Dantza Taldea del Guk de Oro -una réplica en miniatura de la escultura de 31 toneladas de acero que, desde 2003 preside la entrada principal al parque Juan Urrutia-, así como de la makila que otorga también a la formación el honor de dar lectura al pregón de las fiestas patronales de agosto. Sin duda, este 2019 va a ser un año muy especial para el longevo grupo de danzas, que está ya preparado una jornada festiva muy especial para el 18 de mayo. Esa jornada habrá un dantzaldi gigante dentro de la celebración de la Euskal Jaia, al que han pedido que se sume todo aquel que ha formado parte del grupo.