UN reencuentro sin mascarilla, en manga corta y vestido en pleno mes de octubre. La Euskadi tropical y sin restricciones fue uno de los temas estrella en los instantes previos al inicio de la entrega de premios. Un tema de conversación recurrente para templar nervios y dar pie a una conversación más amplia y distendida durante la ceremonia de entrega de los galardones. No faltaron los besos y abrazos, la emoción y el orgullo de familiares y amigos que arroparon a cada uno de los homenajeados de la noche.

“Conozco a una gran mayoría de los invitados porque muchos han pasado por mi consulta”, resumió con gracia Itxaso Zarandona, doctora durante tres décadas de Fruiz y Arrieta, guardiana de la salud de muchos vecinos de Mungialdea. Con pena cuelga la bata, pero sus pacientes le recordarán con especial cariño toda la vida. La de ayer fue una velada en la que los invitados aprovecharon para lucir sus mejores galas, como fue el caso de Marcela Pava Gómez y Gorka Areitio. “Hemos dejado las botas de la huerta en casa por un día, que la ocasión lo merecía”, apuntaron mientras aprovechaban los instantes previos para dar la merienda a la pequeña Maren, de apenas seis meses de edad, que no quiso perderse un día tan señalado para aita y ama y se portó estupendamente arropada por familiares como Ainhoa Areitio, Ana Elordui y Sebas Vega, junto a los pequeños Marun y Marva Areitio.

A pocos metros del centro del municipio tienen sus viñas los responsables de la bodega Butroi quienes aprovecharon instantes antes del inicio para brindar, por supuesto, con un buen txakoli.

Después de inmortalizar el recuerdo para la posteridad, los invitados fueron entrando al frontón de Gatika, que se convirtió en galería por un día de la mano de la artista gatikarra Nekane Arrieta para dar color a la ceremonia de los Laboral Kutxa DEIA Hemendik Sariak.

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Mungialdea, una sincera identidad BORJA GUERRERO

Sobre el escenario, el presentador de la gala, Alain Salterain, dio la bienvenida a los premiados en un evento en el que no faltó el más mínimo detalle obra de la minuciosa labor de Joana Pérez.

Orgullosa de albergar esta ceremonia que premia el valor humano de las personas, agrupaciones y entidades que imprimen un carácter especial a la comarca se mostró la anfitriona Onintze Amezaga Bilbao, alcaldesa de Gatika, que estuvo respaldada por parte de su corporación como Nekane Garmendia y Arantza Egia, entre otras.

En la mejor compañía, la de sus padres, llegó Jone Bilbao con Kepa Bilbao y Eva Lotina, al igual que Andoni Garai, que acudió junto a Marije Goienaga y Alazne, Uxue, Esti y Anne Garai.

En representación de Paulina Urresti fue su hija Pili Sertutxa, quien prefirió dejar tranquila a su ama que, no obstante, algo se olía. “Le he dicho que iba a recoger un premio en su nombre y se ha quedado con la mosca detrás de la oreja”, desveló. Un nutrido grupo de integrantes de Urrusti Dantza Taldea, con su presidenta Maialen Armendariz a la cabeza, acudieron a recoger su galardón también.

La gala también contó con la presencia de la directora de DEIA, Marta Martín; el director general de Editorial Iparraguirre, Javier Andrés; el director editorial y de contenidos de NTM, Iñaki González; el director de desarrollo de negocio, Kike Hermosilla que en sus últimos premios estuvo arropado por su mujer Itxaso y sus hijos Paola, Aitana y Kike; la directora comercial Aitziber Jauregi, además de Iñigo Aspiunza, entre otros.