- Los actuales son días duros y difíciles. Jornadas que marcarán un antes y un después y así se está viviendo en Barakaldo. El municipio, con más 120 contagiados por el covid-19, se está volcando en la solidaridad con quienes ahora más lo necesitan. Amaia del Campo, la alcaldesa fabril, reconoce que "esta crisis nos va a hacer replantearnos el desarrollo de algunos proyectos porque nuestra prioridad son las personas y, ahora, más que nunca, debemos centrarnos en ellas".

La situación es desconocida para varias generaciones, la prioridad absoluta es tratar de poner freno al virus€ ¿Cómo está viviendo personalmente esta crisis sanitaria?

—Se vive con preocupación. Preocupación por todo el mundo y también por los seres queridos. Es una situación desconocida y están siendo días duros y complicados y también de mucha responsabilidad porque desde el Ayuntamiento tenemos que estar más que nunca al lado de nuestros vecinos.

Imagino que el día a día municipal ha cambiado por completo porque las necesidades a las que hay que dar respuesta se están multiplicando.

—Las necesidades y la situación cambian casi minuto a minuto y hay que intentar dar respuesta a todo ello. Nos estamos reinventando a cada momento y han cambiado muchas cosas en nuestro funcionamiento diario, desde la forma de trabajar hasta servicios como, por ejemplo, el de limpieza, que está redoblando las tareas de desinfección, sobre todo, en lugares de mucho tránsito de personas como los centros de salud y los contenedores de basura, entre otros.

Ustedes cedieron recientemente las instalaciones del topaleku del CIS para que Cruz Roja Bizkaia coordine desde allí parte de sus operativos, el Taller Usoa ha entregado 10.000 mascarillas a Osakidetza... Toda ayuda es imprescindible en este momento.

—Me gustaría destacar la gran respuesta de la ciudadanía de Barakaldo. Está siendo impresionante y es algo que me emociona. Está habiendo una respuesta increíble a nivel de voluntariado, de personas que desean poner su granito de arena para hacer más fácil la vida a quienes ahora más lo necesitan. En cuanto dimos la noticia de que se harían mascarillas para entregárselas a Osakidetza, ya había gente a las 8 de la mañana pidiendo información sobre cómo podía colaborar. Ahora, como las necesidades cambian cada minuto en esta crisis, Osakidetza nos ha pedido que se tejan batas y que se coordine su entrega a través de Usoa. Haremos todo lo que esté en nuestra mano para que superemos esta situación lo antes posible.

Fueron de los primeros municipios en aplazar el cobro de impuestos y tributos. ¿Están analizando la implementación de nuevas medidas para dar apoyo a la ciudadanía en estos momentos tan delicados?

—Estamos analizando la situación constantemente, pero está claro que habrá que tomar más medidas próximamente porque, si no está ocurriendo ya, a esta crisis sanitaria le va a suceder una crisis económica. Siempre nos hemos centrado en las personas en nuestra gestión, pero ahora más si cabe. Están surgiendo nuevas necesidades y una de ellas es la de la educación de los niños, por ello, estamos trabajando con Save The Children en la implementación de una iniciativa en este sentido.

Según los últimos datos hay 120 barakaldarras infectados de coronavirus.

—Así es. Nos tenemos que cuidar, quedarnos en casa y cumplir las normas. Cuando no se respetan, la Er-tzaintza y la Policía Local actúan y así lo demuestran las siete detenciones y 440 denuncias que se han realizado en estas dos semanas. Por fortuna, el nivel diario de denuncias se está reduciendo considerablemente.

¿Qué efectos puede tener esta alerta sanitaria en algunos de los proyectos municipales que estaban previstos a medio plazo?

—Esta crisis, lógicamente, nos va a hacer replantearnos el desarrollo de algunos proyectos. Nuestra prioridad son las personas y nos tendremos que centrar más si cabe en ellas. De esta situación tan difícil debemos salir y debemos de hacerlo todos, sin que nadie se quede atrás.

Por último, ¿qué le diría a los barakaldarras de cara a las dos semanas, como mínimo, que restan de confinamiento?

—Que se cuiden ellos y que cuiden a sus mayores y a quienes están trabajando por hacer que esta crisis sanitaria pase lo antes posible. La forma de cuidarles a todos es quedarse en casa. Solo me queda animarles y decirles que somos un pueblo de gente fuerte, que juntos somos más fuertes y que juntos saldremos de todo esto. Aurrera Barakaldo!

"La respuesta solidaria de la ciudadanía de Barakaldo ante la alerta sanitaria está siendo impresionante"