Cada urduliztarra genera diariamente “1,26 kilos de residuos en el hogar” y solo el 20% se recoge de forma selectiva para poder reciclar. La materia orgánica es la que mayor proporción representa en peso, en torno al 40%, y por eso es “muy importante” potenciar la recogida selectiva de esta fracción, señalan desde el Ayuntamiento de Urduliz, que ha puesto en marcha una campaña especial para fomentar la recogida selectiva y el reciclaje de los residuos orgánicos que generamos en el hogar.

“Hoy por hoy, los resultados de la recogida selectiva en Urduliz son muy bajos y tenemos que revertir esta situación”, indican. Para tratar de concienciar a la ciudadanía, en todos los portales se ha instalado un bando municipal informando de la campaña y un educador ambiental pasará por todos los hogares del casco urbano para informar. A los participantes en la campaña se les facilitará el material necesario para la recogida selectiva de biorresiduos: un cubo de 10 litros, bolsas compostables, llave para abrir el contenedor marrón y hoja informativa.

Al mismo tiempo, se realizará un “trabajo personalizado” con espacios como la escuela, hospital, establecimientos de hostelería, tiendas de comestibles, etc. Asimismo, se ha editado un nuevo díptico informativo que se repartirá a la ciudadanía en casa para que la recogida selectiva se pueda realizar “de forma inequívoca”, apuntan.

Igualmente, para reforzar la campaña se han instalado dos estructuras de madera en la plaza Antsonekoa con información detallada. Durante el mes se pueden ver allí y, a través del código QR, se puede descargar en el teléfono el soporte de información para reciclar sin dudas.

Según explican, a partir de ahora en el contenedor marrón se deben recoger “todos los residuos orgánicos, tanto de origen vegetal como animal, cocinados y no cocinados”. Actualmente, el municipio está “muy lejos” del objetivo del 50% que marcan las directivas europeas. Por último, sostienen que potenciando la recogida selectiva, además de generar “un evidente beneficio medioambiental”, se logra “un importante ahorro de dinero para toda la ciudadanía”. “El tratamiento de los residuos que se recogen en el contenedor del rechazo es el más caro de todos”, concluyen.