Con medio centenar de casos positivos por covid-19, ¿cómo vive la situación?

—Con inquietud por tratarse de algo desconocido para todos. Es cierto que no somos uno de los municipios con mayor número de afectados y, en principio, ahora la situación está más controlada. No obstante, quiero trasladar mi solidaridad a las personas que han sufrido por el virus.

¿Cómo es la gestión municipal?

—Está siendo complicada. Desde el primer momento pusimos en marcha un teléfono de atención 24 horas y, por medio de nuestros canales de comunicación y redes sociales, hemos ido informando de las decisiones adoptadas. Además, del equipo de gobierno, tanto la concejala liberada como yo hemos seguido trabajando presencialmente, mientras que el resto del personal municipal, además de trabajar a turnos de manera presencial, también teletrabaja desde casa.

¿Qué recursos se han destinado a las labores de desinfección?

—Se ha reforzado la limpieza de edificios donde hay actividad, como el ayuntamiento, y de espacios públicos como ascensor del metro, marquesinas, barandillas, ambulatorio...

¿Qué medidas económicas contemplan frente a la crisis?

—Una de las primeras medidas que adoptamos fue retrasar el cobro del impuesto de circulación al segundo semestre del año. Además, vamos a aprobar un paquete de ayudas directas a establecimientos que se han visto perjudicados por el cese de actividad. Asimismo, para garantizar que puedan desempeñar sus servicios con seguridad, se les han facilitado pantallas de protección, donadas por la empresa Maier, y gel hidroalcohólico, a cargo de Beca Grafic. Igualmente, se distribuirán mascarillas cedidas por Metallo.

La Mancomunidad de Uribe Kosta, de la cual es presidenta, gestiona las ayudas sociales.

—Desde el inicio, se ha ofrecido asistencia telefónica las 24 horas del día y se han cubierto las necesidades básicas de las familias más vulnerables mediante la entrega de alimentos o bien con vales para comprarlos. También, junto con Getxo, se han reforzado los recursos para las personas sin hogar. Además, se ha acelerado la gestión de las Ayudas de Emergencia Social y se han establecido nuevas ayudas. También hemos colaborado con el Banco de Alimentos de Bizkaia y Cruz Roja.

¿Han incrementado las ayudas?

—Los datos de finales de abril indican que ha habido un incremento importante de ayudas para necesidades básicas, como alimentación y vivienda. En concreto, un 67% de los demandantes son personas que han acudido por primera vez a los Servicios Sociales, debido principalmente a la pérdida de empleo. También se ha detectado un gran número de empleo sumergido. Asimismo, un 50% ha solicitado ayudas para alquiler o para la hipoteca, además de para alimentación, y un 27% únicamente para alimentación.

¿Qué repercusión tendrá esta crisis en las arcas municipales?

—De momento no sabemos el alcance. La recaudación general se está reduciendo y bajará aún más. Esto nos lleva a tomar decisiones desde la prudencia. Por eso vamos a realizar un nuevo proceso participativo para el presupuesto de 2021 con el fin de identificar las prioridades en esta nueva realidad económica.

¿Se han frenado proyectos?

—De momento no se han tomado decisiones en ese sentido. Hay proyectos que se han retrasado debido a la imposibilidad de llevar a cabo las adjudicaciones, pero otros como el acondicionamiento de los locales de Santa Ana, donde irá el Berango Lab, y las salas de estudio ya están en marcha. La próxima semana nos gustaría habilitar crédito para cubrir el parque infantil entre Santa Ana y Basotxu. Debemos actuar con cautela, pero también incentivar la inversión pública para potenciar la actividad económica. Las instituciones que puedan, tienen la responsabilidad de seguir invirtiendo.

¿Vislumbra la normalidad?

—Sí, aunque dependerá en cierta medida de cada servicio municipal. El Ayuntamiento, poco a poco, irá retomando la actividad presencial y atenderá con cita previa. Estamos trabajando en un protocolo para la biblioteca y el servicio de podología. Se han suspendido los udalekus y, respecto a las fiestas, aún no hemos tomado una decisión, pero está claro que, en caso de celebrarse, serán de otra forma.

Han adaptado las actividades con talleres ‘on line’ e incluso un videojuego exclusivo.

—Hemos reorganizado las actividades culturales y deportivas. En la medida de lo posible, estos servicios se han trasladado a la ciudadanía por redes sociales. Y el videojuego ha tenido un gran éxito.

“Vamos a aprobar ayudas a establecimientos que se han visto perjudicados por el cese de actividad”

“Se va a realizar un proceso participativo para identificar las prioridades en esta nueva realidad económica”