A pesar de estar sumergidos ya en la sexta ola, el sector del taxi nunca “ha bajado la guardia” ni olvidado su vocación de servicio, afirma Borja Musons, presidente de la Federación Vasca del Taxi y de Radio Taxi Bilbao.

¿Cómo está afectando la sexta ola de la pandemia al sector del taxi?

—Las nuevas restricciones de diciembre nos hicieron bastante daño porque todas las previsiones que teníamos se fueron al garete. Enero está siendo durísimo, está todo muy vacío y podemos estar teniendo grosso modo una caída de un 30% en la recaudación.

¿Ha habido muchos contagios en el gremio por el ómicron?

—Hemos tenido a compañeros que han tenido la desgracia de contagiarse, pero en Bilbao no hemos tenido ningún caso extremadamente grave.

¿Se han contagiado trabajando?

—Es complicado saber dónde se ha contagiado cada uno, pero creemos que no ha sido trabajando porque cuando se traslada a una persona enferma de covid se toman muchísimas precauciones.

¿Las han extremado al ser esta variante más contagiosa?

—A nivel laboral en el taxi en ningún momento se ha bajado la guardia. Hemos seguido con todas las medidas de seguridad y, gracias a eso, no tenemos un número elevado de contagios ni ningún foco.

¿La clientela es sincera y dice que tiene covid al pedir un taxi?

—Hay de todo, pero yo creo que la gente está actuando de forma bastante responsable. Muchos cuando llaman nos dicen: Soy positivo.

¿La pandemia

—No, seguimos estando los mismos que antes. Ha habido taxistas que se han jubilado y lo han dejado, pero como en cualquier otro momento. No estamos teniendo un montón de abandonos. De hecho, estamos teniendo incorporaciones de gente nueva a un ritmo bastante normal.

¿Cuántos taxis están trabajando actualmente en Bilbao?

—En Bilbao hay 774 licencias. Calculo que, entre bajas, gente que está jubilada o para transferir, habrá unas 50 no operativas.

¿Cuántos taxistas están dispuestos a llevar a clientes con covid?

—No tenemos una lista, porque es voluntario, pero podemos tener entre el 10 y el 20% de la flota dispuesto a hacer esos servicios. En Radio Taxi Bilbao tenemos 512 licencias, así que calculo que tendremos entre 50 y 100 dispuestos a hacerlo. Un compañero que nunca ha hecho un traslado de un positivo puede estar hoy en el hospital y decir: Pues lo voy a hacer. No hay que apuntarse. Lo pueden hacer en cualquier momento y también dejar de hacerlo porque le cogen miedo o lo que sea.

Este servicio entraña un riesgo.

—Es un servicio un poco más tedioso porque es como cualquier otro, pero con ese plus de peligrosidad y de que, cuando acaba, el taxista tiene que limpiar todo. Tiene ese extra y no va a facturar más por ello. Las tarifas las marca el Ayuntamiento y no incluyen la limpieza del vehículo.

¿La demanda es muy alta?

—No, es puntual y tampoco es que sea muy alta. No estamos teniendo muchos problemas para asignar estos servicios.

Un taxista dice que le da “más miedo la noche que el covid”. ¿Es Bilbao una ciudad insegura?

—Nos puede pasar a cualquier persona cualquier cosa por la noche o por el día, pero no podemos decir que Bilbao sea una ciudad insegura. Ahora, el miedo es libre y las personas que temen la noche suele ser porque han tenido alguna mala experiencia. Yo he trabajado unos años de noche y nunca he tenido una mala experiencia. He encontrado a más gente buscándome las cosquillas de día.

¿Cuál es hoy en día el principal caballo de batalla del sector?

—Que vaya disminuyendo la pandemia para que podamos volver a desarrollar nuestra actividad sin problemas. Se avecinan cambios de ordenanzas y queremos solicitar al Ayuntamiento que no se olvide de nosotros, que tenga al sector del taxi en consideración.