Las cuentas de Bilbao del próximo año han sido aprobadas este lunes tras ser rechazadas las enmiendas a la totalidad presentadas por la oposición, mientras que el equipo de Gobierno municipal formado por PNV y PSE ha admitido 34 enmiendas de todos los grupos por un total de 1.278.000 euros. El pasado ejercicio fueron 24 por un valor de 932.000 euros. Tampoco este año ha habido un respaldo unánime a los presupuestos de la villa, los de mayor cuantía de la historia de la ciudad para hacer frente la crisis del covid. Las Cuentas aprobadas de manera provisional se elevan a 633 millones de euros, un 8,1% más que este año.

Tras su aprobación, el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, ha argumentado que son unas cuentas diseñadas para afrontar la salida de la pandemia de covid-19, “para la regeneración económica y recuperación del empleo, para la cohesión urbana y social y para mejorar la calidad de vida de los bilbainos”.

De EH Bildu han sido admitidas 10 enmiendas que ascienden a 535.000 euros, con actuaciones para incentivar la participación activa de la juventud, campañas de prevención de videojuegos y ludopatía, programas de apoyo a la educación, cursos de euskera para inmigrantes o ayudas especiales para gastos de energía, entre otros.

De Elkarrekin Podemos, otras 10 por valor de 385.000euros que se destinarán a ayudas humanitarias y de emergencia, promoción de mercados, formación en atención a mujeres víctimas, apoyo a la educación, compra de bicicletas… Por último se han aprobado otras 14 del PP, que ascienden a 358.000 euros. Entre ellas se ha acordado incrementar las ayudas de emergencia social, promocionar la moda en el comercio bilbaino, apoyo a la Comisión Anti Sida y restauración de la grúa de estiba de Zorrotza.

Tras esta jornada de debate y aprobación, el presupuesto deberá ser ratificado en un nuevo pleno extraordinario que se celebrará en diciembre, trámite obligado para la puesta en marcha, a partir del 1 de enero, de las nuevas cuentas que regirán la actuación municipal del próximo año. La portavoz de EH Bildu, Jone Goirizelaia, ha justificado su rechazo a la totalidad de los presupuestos porque no incluyen las “medidas estructurales” necesarias para hacer frente a la situación derivada de la pandemia.

También la representante de Elkarrekin Podemos, Ana Viñals, ha opinado que para afrontar la situación actual “no basta la hoja de ruta” del Gobierno municipal. Y la portavoz del grupo del PP, Raquel González, ha criticado que los presupuestos aprobados son “más de lo mismo” y “no responden a la necesidades de los vecinos”.

En la defensa de estas cuentas el portavoz del grupo socialista, Alfonso Gil, ha apuntado que la “hoja de ruta” del equipo de gobierno es “generosa” con la oposición; y la portavoz del PNV, Nekane Alonso, ha explicado que las cuentas “han sido elaboradas con rigor, equilibrio y sin deuda”. La concejala de Hacienda, Marta Ajuria, ha calificado los presupuestos elaborados como “expansivos”.

Las cuentas incluyen inversiones durante el próximo año por valor de 115 millones de euros (32,5 millones más que en 2021), de los que 50 millones se invertirán en los barrios. Entre las acciones a desarrollar, se encuentran Zorrotzaurre, la expansión y revitalización de Artxanda, la financiación de las obras de ampliación del Museo de Bellas Artes y Euskal Museoa; la construcción de más haurreskolak; nuevos planes de empleo, políticas sociales y de igualdad, eventos y ayuda al comercio y a nuevas empresas.