Mil euros; es la recompensa que ofrece una pareja bilbaina a quien encuentre a su gata Arya, extraviada el pasado 7 de octubre. "Arya tiene que estar en alguna parte y seguro que alguien sabe algo, es un animal muy llamativo", confían María y Xabier.
Arya es una gata común, totalmente blanca, dócil, con ojos verdes, esterilizada y con chip. Pero, sobre todo, una más de la familia para esta pareja bilbaina. El animal desapareció el pasado 7 de octubre de su casa, "sin saber cómo", en la subida a la Basílica de Begoña.
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Ni las batidas ni sus preguntas a los agentes de la Policía Municipal, operarios de limpieza, protectoras o veterinarios han dado sus frutos. Tampoco los cientos de carteles con los que han llenado farolas y fachadas de Bilbao para recuperar a su animal de compañía.
Desesperados, y como último recuros, han decidido ofrecer una recompensa de 1.000 euros a quien encuentre a Arya. "Que sepamos es la más alta que se ha ofrecido en Bilbao por un animal sin raza, pero parte de una familia que la extraña mucho", reconocen.
