BILBAO - Una nueva parada de autobús en Arabella y Sarrikue hace de estos barrios un entorno más accesible. Para lograrlos fue necesario una expropiación y un derribo, pero los vecinos ya pueden coger el autobús de una manera más cómoda.

La nueva parada se encuentra en la calle Atxetabidea, una zona que el Área de Obras y Planificación Urbana del Consistorio bilbaino, valoró como la más accesible y mejor conectada de la zona y está ubicada en el solar que ocupaba el edificio número 52 de la citada calle, recientemente derribado.

Los trabajos para acondicionar la zona incluyeron también la ejecución de una acera, que conecta la parada con el paso de peatones existente en la trasera del número 2 de la calle Sarrikue, y la colocación de una barandilla de acero inoxidable entre la parada y el talud exterior. La actuación quedó completada, además, con la creación de un nuevo paso de peatones que conduce hasta las escaleras existentes en el lateral del número 1 de la barriada de Sarrikue.

La nueva parada de autobús sustituye a otra anterior que se elevaba sobre una plataforma de hormigón por la compleja orografía de su entorno. La plataforma sobre la que se asentaba la marquesina ha sido sustituida por un carril de circulación exclusivo para autobuses, de manera que estos puedan dar la vuelta y bajar. Este tramo nuevo de vial, así como el entorno de la nueva parada, ha sido asfaltado y adecuado con todas las señales horizontales y verticales necesarias

Los trabajos para mejorar la accesibilidad del entorno no fueron sencillos. De hecho, fue necesario expropiar y derribar el edificio de Atxetabidea 52, lo que generó un espacio abierto sobre el que está instalada la nueva parada.

Esta nueva insfraestructura está enmarcada dentro del Plan Auzokide para la mejora de los barrios de Bilbao, una de las herramientas más importantes de participación ciudadana con la que cuenta el Ayuntamiento de la villa y pieza clave en la actividad del Área de Obras y Planificación Urbana.

El presupuesto destinado a las mejoras fue de 150.000 euros y el plazo de ejecución ha sido de dos meses y medio. A este montante habría que añadir el coste de la expropiación del terreno y la compraventa y derribo de la parcela en cuestión, que ascendió a 625.859 euros, de los cuales 520.540 euros corresponden a la adquisición de la parcela de la casa derribada.

La superficie expropiada alcanza los 1.256 metros cuadrados: los 478 metros cuadrados de la edificación derribada, donde se ubica la nueva parada de autobús, y el resto de la parcela que será destinada al futuro parque de Atxetabide.