BILBAO - “Empoderar a la comunidad en la prevención hace no solo que crezca la confianza entre agentes y vecinos, sino que incide efectivamente en una merma de los comportamientos incívicos y un aumento de la cohesión social”. La concejala de Seguridad Ciudadana, Amaia Arregi, hizo esta reflexión en la clausura de las jornadas de Seguridad celebradas en el Palacio Euskalduna y que contaron con la presencia de expertos internacionales en la materia.

La responsable de Seguridad considera necesario contar con el punto de vista de colectivos de mujeres, personas mayores, asociaciones vecinales y comerciantes para conseguir el objetivo de construir la ciudad que se busca, “una ciudad segura -afirmó- para todos los que viven, trabajan o visitan Bilbao”.

Representantes de estos colectivos reclamaron ayer ante los responsables de Seguridad sus inquietudes en esta materia. Desde la necesidad de más empatía con las mujeres que piden protección a la demanda de las personas mayores que representan el 30% de la población de Bilbao. El representante de los vecinos exigió una justicia más contundente y el de los comerciantes, más patrullas de calles en las zonas de la villa con más delitos.

Los colectivos sociales tuvieron ayer un papel protagonista para contribuir a reforzar la seguridad en Bilbao.