Bilbao - La entrada en servicio de la nueva estación de autobuses soterrada de Bilbao está muy condicionada por el calendario. Aunque desde el Ayuntamiento aseguran que el estreno de las dársenas está previsto para el último trimestre de este año, octubre es el mes clave.

La razón es que para finales de ese mes el grupo Arrasate, que resultó ganador del concurso abierto el pasado año por Bilbao Ría 2000 para construir el rascacielos previsto en la parcela triangular, debe tener en sus manos el solar donde ahora estacionan los autobuses. Fuentes de la gestora de cooperativas de viviendas confirmaron ayer a DEIA que “en octubre tiene que estar libre el terreno porque en ese mes tenemos el compromiso de Bilbao Ría 2000 para firmar las escrituras ante notario”.

En junio del año pasado, la sociedad vasco estatal impulsora del proyecto residencial en los antiguos terrenos de Garellano adjudicó por un montante de 50,6 millones de euros al grupo Arrasate la parcela P08 para construir la quinta torre proyectada y que tiene la firma del arquitecto británico Richard Rogers. El rascacielos tendrá 35 plantas, albergará 166 viviendas con 235 plazas de aparcamiento y dispondrá de una amplia galería comercial.

En las condiciones de la adjudicación había un compromiso de aportar por parte del ganador un 20% del coste final como mínimo en concepto de opción de compra, para un año después, como máximo, escriturar el terreno, algo que vence en octubre próximo.

El cumplimiento de este compromiso obliga a que la nueva Termibus esté disponible para ser operativa unas semanas antes de que se acuda al notario, ya que cuando Ría 2000 entregue el solar triangular lo debe hacer carente de cualquier uso público.

Ello supondrá que a principios de octubre se procederá a la mudanza de los servicios de Termibus de un día para otro para dar tiempo a desmantelar las instalaciones actuales en las jornadas posteriores. - A. G. A.