Leioa sustituye las pintadas en paredes por murales artísticos
Las comunidades de vecinos pueden pedir al Ayuntamiento que limpie y/o reemplace los grafitis
El Ayuntamiento de Leioa y las comunidades de vecinos se han propuesto cambiar las pintadas vandálicas por murales decorativos tanto en espacios públicos como privados que den a la vía pública. Se trata de la iniciativa LeioApain que ya se ha estrenado con tres obras del artista Pablo Zabala en Langileria, Pinueta y Larrakoetxe. En este caso, en zonas municipales.
Pero esta opción está abierta a los inmuebles cuya titularidad no es pública. Por lo que las comunidades de propietarios que lo deseen pueden solicitar al Consistorio que intervenga en las fachadas o cierres de parcela que se ven desde la vía pública para eliminar pintadas vandálicas o realizar murales decorativos. Estas actuaciones no supondrán ningún coste para las comunidades solicitantes, ya que el presupuesto será íntegramente municipal.
De esta manera, el hecho de que una pared o cierre sea de propiedad privada ya no será un impedimento para que el Ayuntamiento actúe, siempre que exista una solicitud expresa de la comunidad afectada. La petición se puede tramitar a través de la sede electrónica municipal. El alcalde, Iban Rodríguez, destaca que “con esta nueva medida, Leioa refuerza su compromiso con un entorno más cuidado y habitable, donde arte, limpieza y colaboración vecinal van de la mano para construir un municipio más agradable para todas y todos”.
Las primeras pinceladas de este proyecto ya se han dado. El primero de los murales se encuentra en Langileria, una zona de tránsito frecuente tanto peatonal como en coche. La obra presenta un recorrido de colores que forma un paisaje con árboles, bosque y formas geométricas. Mientras que el segundo mural está en Pinueta. En este caso, el reto ha sido mayor, ya que se trataba de una pared antigua y sombría. Para transformar este entorno, Pablo Zabala ha optado por colores claros y blancos, incorporando elementos naturales como flores –de menor a mayor tamaño, reflejando la evolución de la naturaleza– y formas geométricas que aportan equilibrio. El contraste entre lo orgánico y lo ordenado busca transmitir calma y armonía.
La tercera creación, en Larrakoetxe, está ubicada en una pared nueva, muy visible y transitada. Allí, el creador ha trabajado con manchas de colores que forman un paisaje boscoso, utilizando un estilo pictórico que combina lo abstracto con lo realista. La intención es clara: preservar el vínculo con lo verde en un entorno cada vez más urbanizado, logrando que el hormigón y la naturaleza convivan en equilibrio.