Recientemente, Aena, la sociedad estatal de quien dependen todos los aeropuertos del Estado, impulsó una campaña publicitaria en la que se planteaba qué ocurriría en la sociedad si no existieran estas infraestructuras. En el caso del aeropuerto de Bilbao supondría un escenario inimaginable, no solo por las consecuencias sociales y de movilidad al carecer de conexiones aéreas, sino también por la ausencia del impacto económico que supone su actividad en Bizkaia.

Según Bilbao Air, la sociedad para la promoción del aeropuerto de Bilbao, este impacto se cifró el pasado año en más de 5.480 millones de euros teniendo en cuenta tanto la actividad directa en la infraestructura, la indirecta que genera y la inducida existente a su alrededor. No hay que olvidar que el pasado ejercicio La Paloma vio pasar por sus dependencia a más de 6,77 millones de pasajeros batiendo todos los récords establecidos hasta la fecha.

Esta cifra de 5.480 millones resulta espectacular si se tiene en cuenta que supone el 15% del Producto Interior Bruto (PIB) que generó el pasado año Bizkaia, cifrado en algo más de 43.214 millones de euros. Unos guarismos que aún pueden mejorar a falta de que Aena facilite a Bilbao Air unos últimos datos, según indicaron fuentes de la entidad dependiente de la Cámara de Comercio, Industria, Servicios y Navegación de Bilbao.

Y es un impacto que, lógicamente, superó al registrado el 2023, año también de récord ya que superó los 6,33 millones de pasajeros. Fue el primer año en que se editó el informe donde especificaba cómo en ese ejercicio, el impacto fue de 4.725 millones de euros, lo que supuso un 13% de los algo más de 37.163 millones de Producto Interior Bruto que se originó en Bizkaia ese año.

La conectividad aérea se traduce también en muchos empleos. Las cifras del informe indican que en torno a la actividad aeronáutica directa e indirecta, además de la inducida, en 2024 se mantuvieron un total de 31.379 puestos de trabajos, un 1% de aumento con respecto al anterior ejercicio, cifrados en algo más de 27.000 empleos.

Generación de empleo

Este registro supone un 14% del total de empleos activos en el territorio el pasado año que casi alcanzaron el medio millón y un punto porcentual de incremento con respecto a 2023.

Sorprende por su magnitud toda la actividad económica que depende del aeropuerto de Bilbao. Los datos del informe de 2023, a la espera de cerrar el documento con las cifras concretas del año pasado, indican que la infraestructura aérea tuvo un impacto directo de casi 264 millones de euros. Esta repercusión es la que corresponde con la producción y el empleo generados directamente al que se suma el gasto que atrae una infraestructura como el aeropuerto.

En este cómputo se incluyen desde los servicios tecnológicos y de transportes, pasando por el alquiler de vehículos, el comercio y la restauración de la terminal, hasta lo que genera la propia Aena y, cómo no, lo que depende de la actividad de las aerolíneas y las agencias de viajes.

De los 264 millones referidos, este último apartado es el que más dinero genera, algo más de 109 millones de euros, seguido de los servicios anexos aeronáuticos y la seguridad privada necesaria, que se quedan en 41,46 millones.

Todo este movimiento, traducido a empleos, alcanza las 1.947 personas de las que casi un tercio, 625, hacen funcionar todo lo que depende de las compañías aéreas y las agencias de viaje, mientras que 352 puestos se dan en otros servicios y la seguridad privada. Aena contó en nómina con 200 personas y sorprenden los 346 empleos activos en los organismos oficiales y servicios auxiliares. Las cafeterías y tiendas de la terminal se mantuvieron con 180 personas.

Por lo que se refiere al impacto indirecto, todas aquellas empresas y personas que se benefician de soslayo de las inversiones y del gasto que genera el aeropuerto, es el que más dinero y empleos genera hasta superar los 2.842 millones de euros, según el informe de Bilbao Air.

Aquí se incluye la producción creada así como las importaciones generadas y el número de trabajadores, que alcanzó las 2.455 personas.

Finalmente, el estudio financiero cifra en más de 1.632 los millones generados por la actividad inducida del aeropuerto en el año 2023. Hasta 26 actividades, industrias y servicios se incluyen en este impacto que recoge el consumo de bienes y operaciones de los empleados de los sectores que se benefician, directa o indirectamente, de las inversiones y gastos del aeropuerto de Bilbao.

Se divide en cuatro apartados: la producción propiamente dicha, los empleos creados, los consumos intermedios y el VAB, es decir, el valor añadido durante el proceso productivo.

En este apartado llama la atención los más de 5,5 millones de euros del sector de la construcción, por las obras del edificio técnico del aeropuerto activa en 2023 y que acabaron en 2024; la hostelería y el transporte, que movió casi 4,15 millones de euros, y el comercio al por menor y al por mayor que generaron una actividad de 2,64 y 2,95 millones respectivamente.

El número de empleos que se mantuvieron en 2023 por esta economía inducida fue de 11.157 trabajadores, llevándose la palma las actividades con más producción referidas que sumarían entre las cuatro un total de 2.832 puestos de trabajo.

Al detalle

Tres impactos directo, indirecto e inducido

El informe recoge no solo lo que significa la actividad económica del aeropuerto, también la indirecta, así como la inducida de las que se benefician múltiples sectores del territorio de Bizkaia.

Te puede interesar:

Dos años últimos con intención de continuar

La creación de esta herramienta con un algoritmo propio es de nuevo cuño y está en constante mejora. Con ella se han analizado los años 2023 y 2024, un trabajo que proseguirá también para el presente ejercicio y posteriores.