Enkarterri asiste con inquietud a nivel institucional y ciudadano a la proliferación de proyectos para implantar parques eólicos en la comarca. En este sentido, la plataforma Enkarterrin Makroeolikorik Ez ha entregado más de 2.000 firmas que respaldan sus objeciones a la instalación El Roble, que contempla siete aerogeneradores en Galdames, Güeñes, Sopuerta y Zalla, consistorios que también han trasladado su oposición a una infraestructura que tocaría al entorno del monte Ubieta-Zipar.
La iniciativa promovida por la empresa Rapid Reaction Systems con una potencia de 31,5 megavatios “pone en riesgo 14,95 hectáreas del municipio, afectando a Montes de Utilidad Pública y hábitats de interés comunitario, como los prados pobres de siega y los bosques de ribera”, explica el Ayuntamiento de Güeñes, que, con la unanimidad de todos los grupos políticos, se ha posicionado contra la instalación y ha presentado ante el Gobierno vasco un “riguroso documento de alegaciones”.
Los siete aerogeneradores y cinco kilómetros de nuevos tendidos eléctricos “suponen una grave amenaza para especies protegidas, como el alimoche, el visón europeo y diversos murciélagos, además de generar un significativo impacto visual y paisajístico”.
El Consistorio recuerda que “según el servicio de Patrimonio Natural de la Diputación Foral de Bizkaia” Enkarterri es “un enclave crítico para la conservación del alimoche, un valor que el Ayuntamiento está dispuesto a proteger frente a una planificación eólica inadecuada”. Por ello, apuesta por un “modelo sostenible que preserve nuestro valioso patrimonio natural y ambiental”.
Por su parte, Galdames incide en estos mismos aspectos destacando la vulnerabilidad de especies como el mencionado alimoche y el buitre leonado, entre otras. Otros de los factores que el Ayuntamiento considera clave a la hora de pedir que el proyecto no siga adelante son la proximidad a viviendas –en barrios como Concejuelo, Umaran y Larrea, a menos de un kilómetro– y la pérdida de más de seis hectáreas de superficie productiva.
En la misma línea, Enkarterrin Makroeolikorik Ez denuncia el impacto de los molinos “de 180 metros de altura con un rotor tripala de 158 metros de diámetro, el tendido de alta tensión de evacuación a la subestación eléctrica de La Jara, así como las pistas de acceso, el cableado subterráneo y las demás instalaciones complementarias, que en su conjunto amenazan con convertir el territorio seleccionado en un polígono industrial”.
La plataforma ciudadana ha entregado más de 2.000 firmas que avalan “una alegación popular que resume los principales argumentos”. Además, han difundido modelos de alegaciones más técnicas “invitando a los vecinos y vecinas a presentarlos de manera individual, telemáticamente o por correo postal”.
Argumentan que el proyecto “responde a una burbuja especulativa” y que el parque eólico “supone un peligro para la salud de las poblaciones cercanas –pues no se respeta la distancia mínima a las viviendas– y una pérdida económica directa”, critican.
Cambio normativo en Zalla
El Ayuntamiento de Zalla “ha ido un paso más allá”, elogian, al iniciar los trámites para una modificación puntual del planeamiento en lo referente al suelo no urbanizable para protección del paisaje. El 13 de mayo a las 18.00 horas en la Kultur Etxea tendrá lugar una jornada participativa y la documentación al respecto se puede consultar tanto en sac.zalla.eus/transparency como en la web municipal.
El apunte
“Hasta 13 zonas”. Enkarterrin Makroeolikorik Ez alerta de que el Plan Territorial Sectorial de Energías Renovables contempla “hasta 13 zonas de localización seleccionadas en la comarca para la industria eólica, ocho de las cuales corresponden a proyectos en activo” que ya han comenzado su tramitación.
Precedente. En junio de 2024 el Ayuntamiento de Balmaseda y la plataforma ya presentaron alegaciones contra los parques eólicos El Haya I y El Haya II, promovidos en la villa.