Las relaciones sociales no tienen edad y, sin duda, son necesarias a lo largo de la vida para mantener la salud física y mental de la población. Compartir momentos de calidad con diferentes personas contribuye a enriquecer el mundo interior de cada cual y en última instancia, a generar una ilusión que en ocasiones se va perdiendo con el paso de los años. Consciente de ello, Caritas Bizkaia trabaja en un proyecto de acompañamiento centrado en generar una oferta de encuentro con otras personas y de refuerzo de las relaciones de cercanía. 

El Área de Mayores y Envejecimiento de Caritas Bizkaia pretende mejorar la calidad y condiciones de vida de las personas mayores, y en especial de las más vulnerables y con menos apoyos, potenciando su autonomía y favoreciendo la permanencia en su entorno habitual. Al mismo tiempo, intenta sensibilizar sobre la situación de este colectivo y sus necesidades de cara a potenciar el voluntariado, tan necesario en una sociedad como la vizcaina, en la que hay más de 250.000 personas mayores de 65 años, de las cuales, una de cada cinco viven solas. Y lo hacen acompañando a las personas en el ejercicio de sus derechos sociales

El proyecto de acompañamiento propicia el encuentro con otras personas y el refuerzo de las relaciones de cercanía. Caritas Bizkaia

Todas sus iniciativas tratan de ayudar especialmente a quienes tienen una red más empobrecida y a la vez facilitan relaciones significativas. Una labor que, al modo de ver de esta entidad de servicios sociales, “no sería posible sin el empeño y dedicación personal de todas y cada una de las personas voluntarias, quienes de forma altruista y gratuita dan un sentido especial a toda la labor que se hace desde el Área”. 

El personal voluntario, apoyado por profesionales, presta el acompañamiento desde el respeto a la autonomía, valores y decisiones de cada persona mayor, y tendiendo siempre a reforzar las capacidades y habilidades que preserve, respetando su intimidad y su derecho a la privacidad, y favoreciendo la sensación de seguridad y control sobre su propia vida.

30 años de andadura

A lo largo de los 30 años de andadura del Área, el acompañamiento que se hacía desde diferentes parroquias a las personas mayores que no podían salir de casa ha derivado en un proyecto de acompañamiento a personas mayores que se desarrolla en 20 municipios de Bizkaia y en el que colaboran unas 300 personas voluntarias, organizadas en equipos coordinados. Ello con el objetivo principal de luchar contra el aislamiento y el sentimiento de soledad de las personas mayores que viven tanto en domicilios particulares como en residencias.

El proyecto responde sobre todo a necesidades emocionales (comprensión, empatía, estima, pertenencia…), pero también a otras de información (recursos), apoyo (gestiones, acompañamiento al médico…), actividad y ocupación del tiempo... Con ello se contribuye a la mejora de la calidad de vida de las personas y se favorece su participación en el entorno comunitario.

Cada persona voluntaria se acerca todas las semanas al lugar en el que resida la persona mayor para escucharla, conversar, leer, pasear, acompañar en actividades… Es una iniciativa adecuada para quienes, por diferentes razones (movilidad reducida, enfermedad, desánimo…), tienen dificultad para mantener relaciones con personas diferentes a sus cuidadores habituales.

La realización de actividades estimula las capacidades de las personas mayores. Caritas Bizkaia

Proyectos de ‘Dinamización’

Las necesidades que plantea la realidad cambiante también han llevado a Caritas Bizkaia a desarrollar otras iniciativas de apoyo a personas mayores, como son los proyectos de dinamización en los que, a través de la realización de actividades, ofrecen espacios de encuentro y estimulan las capacidades de las personas.

La participación en estos proyectos, que se desarrollan actualmente en locales parroquiales de Santurtzi y Portugalete, favorece rutinas, anima al autocuidado e incluso a detectar dificultades que pueden aparecer en la vida diaria a las personas mayores que por diferentes razones (edad avanzada, falta de ánimo, nivel cultural, sensación de rechazo…) no se sienten integradas en otras iniciativas como pueden ser los hogares de mayores o las actividades de los centros cívicos. 

Proyecto ‘Bizi-Bete’

Otra versión del acompañamiento la ofrece el proyecto Bizi-Bete, puesto en marcha en 2013, gracias al cual, las personas mayores pueden encontrarse entre ellas y con otras personas voluntarias para compartir un rato de charla y actividades. Combina, por tanto, las relaciones sociales en el exterior del domicilio con el entretenimiento.

La actividad, desarrollada en Bilbao (Irala, Casco Viejo y Autonomía-Indautxu) y Basauri, es llevada a cabo por un equipo estable de voluntariado y, cada persona voluntaria presta especial atención a una o dos personas mayores con las que establece un vínculo más cercano, de modo que si alguien que acude habitualmente falta un día, contacta con él/el para interesarse y ofrecerle apoyo si lo necesita. 

El proyecto 'Bizi-Bete' combina las relaciones sociales en el exterior del domicilio con el entretenimiento. Caritas Bizkaia

‘Uste On’, otra forma de acompañamiento

En 2020, basándose en la aceptación y el éxito de los proyectos de acompañamiento presenciales y en un local (Bizi-Bete), Caritas Bizkaia reforzó su red de acompañamiento con una nueva modalidad para responder a la soledad de las personas mayores cuyas circunstancias no hacen posible su participación en las presenciales (no aceptar que nadie vaya a su domicilio, vivir en lugares alejados o donde no hay voluntariado disponible…). Así surge Uste On, el proyecto de acompañamiento a través del teléfono.

A través de llamadas telefónicas regulares realizadas por una misma persona voluntaria se va generando un vínculo especial con expectativas de mantenerse en el tiempo.

Esta forma de acompañamiento permite, además, la participación de nuevos perfiles de voluntariado, como son las personas que viajan mucho o que tienen una movilidad reducida.

En toda esta tarea, Caritas Bizkaia agradece la colaboración de la Fundación Víctor Tapia y Dolores Sainz, el Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno vasco y la Fundación BBK.


ALEGRÍA COMPARTIDA

Caritas Bizkaia cuenta actualmente con centenares de voluntarios que dedican dos horas a la semana para acompañar a personas mayores en sus domicilios particulares o residencias. Con su voluntad de aportar algo de su tiempo en beneficio de los demás, ayudan a los mayores a sentirse vivos. Y según su propio testimonio, se convierten en protagonistas de una alegría compartida, tanto en su fuero interno, por favorecer su desarrollo personal y el sentido de comunidad, como desde el sentimiento de agradecimiento que perciben de los mayores. De ahí que hablen de “recibir más que lo que dan”. Al tiempo que ponen su granito de arena para lograr la buscada transformación social.

Las tareas que se llevan a cabo pueden ser desarrolladas por voluntariado de cualquier edad, y son una oportunidad para quienes tienen más años. De hecho, más de la mitad del voluntariado actual del proyecto tiene 70 o más años; y más del 80% de estas personas son mujeres, aunque cada vez se incorporan más hombres y personas más jóvenes.

Contacto con Caritas Bizkaia: Tfno. 94 402 00 74 y mayores@caritasbi.org