"Un testamento a la amistad inquebrantable y a las tonterías que nos han mantenido unidos durante tantos años". Así, de esta manera tan singular, repleta de sinceridad y cariño, definen su libro los autores: Anselmo Ardanza y José Limia. ¿De qué obra se trata? De una que “no ganará el Premio Nacional de Narrativa ni el Planeta”, como asegura con gracia el propio Anselmo. No triunfará en ningún concurso literario, vale, pero esta publicación es única, entrañable y hasta histórica. Es un repaso a las cinco décadas de andanzas de la cuadrilla Gu gara, de Algorta. Un grupo de amigos que nació cuando sus integrantes tenían 16-17 años y que, con sus vaivenes, picos de quedadas y más o menos gente, se mantiene en la actualidad ¡hasta medio siglo después!
Por eso, este libro –La cuadrilla Gu gara a través del tiempo. Crónicas y recuerdos tras 50 años– es tan curioso y afectuoso. “Es una recopilación de susedidos”, apunta Anselmo. Nada extraordinario, ningún episodio de primera plana, ni un momento espectacular. Es la descripción de la vida misma, de la cotidianidad, del paso del tiempo. Todo, hilvanado con fiestas populares, deporte, alguna gamberrada, poteo, tertulias políticas, Athletic, monte, implicación por Getxo... “Un recorrido histórico desde la juventud, pasando por la madurez hasta nuestra ¿vejez? activa actual”, indican los autores. Eso sí, estas letras que son las bodas de oro de una cuadrilla y las fotografías que las acompañan son un canto a la amistad. Y algo así sí que es asombroso y excepcional: medio siglo de unión. “¿Que cómo seguimos juntos? Esa es la pregunta del millón para mucha gente”, admite Anselmo. Él, sobre todo, alude a una palabra para explicarlo: respeto. “Cada uno tenemos nuestras ideas políticas y seguimos manteniendo debates a día de hoy, pero lo primero es lo primero, hay que priorizar la amistad y eso ha sido clave desde siempre”, señala. Luego, han conseguido que esos caminos, que tantas y tantas veces se bifurcan en un grupo que brota imberbe, mantengan un mismo rumbo. “Hoy en día, estamos unos 25-30 de manera activa”, afirma Anselmo. Y bueno, los instantes para ir de potes por Algorta son los más fijos de la semana. “Ahora empieza el calendario oficial con las fiestas, un boom para nosotros: Paellas, San Ignacio, San Lorenzo, Puerto Viejo...”, enumera con ímpetu Anselmo. Los festejos han sido un potente nexo, fuente de acontecimientos, cuna de diversión, de exaltación de la amistad, de ligoteo... Aunque, realmente, estos jovenzuelos que ya están jubilados han tonteado mucho en épocas pasadas con las chicas durante cualquier fin de semana en Telletxe. “Nos decían que éramos unos ligones. Una vez, en los años 80, hasta nos sacaron una pancarta llamándonos robanovias”, rememora este miembro de Gu gara. “En ocasiones, hemos hecho bravuconadas por la noche; nos han podido tildar de chulos y prepotentes, y por eso, en este libro, también pedimos disculpas públicas a los taberneros y las mujeres”, comenta Anselmo. Ahí va ese perdón, por ejemplo, a los propietarios del Charlot por llevarse de fiesta el muñeco que tenían en el bar...
Este recopilatorio de vivencias, aventuras y desventuras, está salpicado del buen humor. “Pero no todo es jiji-jaja”, destaca Anselmo, que pone en valor “el compromiso” de muchos integrantes de la cuadrilla con su municipio, a través de la participación en asociaciones de vecinos, sociales, culturales, y también en clubes deportivos, en especial, de rugby y remo... Es más, los orígenes de esta camaradería están en el grupo scout de Itxas Gane y la Sociedad Etorkizuna. Por lo tanto, el periplo de esta cuadrilla cincuentona condensa, de alguna manera, la trayectoria de Getxo desde 1973 –era en 2023 el 50 aniversario, pero el libro ha tardado en editarse–. Además, sus experiencias son, sencillamente, las de todos. Este libro sin igual tendrá mañana martes su momento de presentación oficial, en la que intervendrá el escritor getxotarra Unai Elorriaga, ni más ni menos. Será a las 19.30 horas en el Casino de Algorta.