La diputada de Euskera, Cultura y Deporte, Leixuri Arrizabalaga, afirmó ayer miércoles que el sobrecoste de más del 40% en el proyecto de remodelación del Museo Vasco, que elevará la cuantía a más de 20 millones, “no es una buena noticia” pero está “plenamente justificado” debido a “cuestiones técnicas imprevisibles”.

Arrizabalaga compareció ayer miércoles en la Comisión de Euskera, Cultura y Deporte de las Juntas Generales de Bizkaia a petición de EH Bildu, cuya juntera Rakel Goñi advirtió de que van a ser necesarios “casi seis millones de euros más” y un año más de plazo para concluir las obras.

La Diputación asumirá la mitad del sobrecoste en el que la dirección facultativa ha tasado los cambios introducidos en el proyecto de rehabilitación integral y ampliación del Museo Vasco debido a varias circunstancias, en su gran mayoría por “cuestiones técnicas imprevisibles”.

Según explicó la diputada, entre estos factores, se encuentran el incremento de obras por la necesidad de mejorar, con nuevos cimientos y micropilotes, la estructura de los distintos edificios que conforman el museo (Misericordia, Unamuno y La Cruz). Además, se han tenido que elaborar estudios geotécnicos complementarios y buscar una solución para retirar el amianto encontrado.

A estas causas, se han sumado la volatilidad de los precios de los materiales de construcción como consecuencia de la inflación por la pandemia de covid-19 y la guerra de Ucrania, además de los costes financieros derivados de la subida de los tipos de interés, entre otras razones.

Por todo ello, precisó, mientras el precio de adjudicación se estableció en casi diez millones de euros, el presupuesto modificado por este nuevo escenario ha ascendido a “una aportación extra de 4.032.100 euros”, cifra a la que se añaden los gastos generales (+6%), el incremento de los beneficios industriales (+19%) y el IVA (+21%). De este modo, se alcanza una cuantía total de 20.078.149 euros.