La designación de Iñigo Iturrate como director del Palacio Euskalduna, en sustitución de Nerea Lupardo, pretende proporcionar una visión "más artística" a la gestión del centro, dando un "impulso a la producción y programación propia".
En una interpelación a petición de EH Bildu, la diputada foral de Euskera, Cultura y Deportes, Leixuri Arrizabalaga, ha dedicado sus primeras palabras a agradecer en público, "como ya lo hice en privado", la labor que durante los últimos años ha llevado a cabo Lupardo al frente del palacio, "que ha permitido sobreponerse a la difícil situación que tuvo que atravesar debido a la pandemia".
Pero, ha dicho, Euskalduna se enfrenta ahora a "un tiempo nuevo", recién cumplidos los 25 años desde su inauguración, con retos también nuevos. "Debemos ir más allá de la sobresaliente gestión económica que ha desarrollado la anterior directora y su equipo", ha explicado, "avanzando en la producción y programación propia, dando un enfoque más artístico a la gestión".
Por unanimidad
La designación de Iturrate al frente del palacio se decidió "por unanimidad" en el último consejo de administración del centro, al entender que es la persona "más adecuada" para dirigirlo en los próximos años. "La designación ha sido lícita y legal, y el tiempo nos dará la razón", ha subrayado.
El portavoz de EH Bildu, Iker Casanova, ha criticado duramente este nombramiento que, a su juicio, responde a una "elección política". Tras reconocer que los estatutos del Palacio Euskalduna permite la "discrecionalidad" a la hora de elegir su dirección, "sin que se recoja ningún requisito", ha lamentado que esa libertad se haya utilizado "para recolocar a cargos políticos de un partido en una empresa foral", en lugar de "buscar a una persona con un currículum más adaptado. En el currículum del señor Iturrate no hay ningún antecedente profesional ni académico que justifique que sea la persona más indicada para dirigir una de las instituciones culturales más potentes de este territorio".
Casanova ha arremetido contra la designación de los responsables de las empresas forales, en los que se utilizan "sistemas opacos de fichaje de personal. Están haciendo un flaco favor a la confianza de las personas en las instituciones", ha concluidos
