El pasado mes de abril, el Palacio Olabarri, emblemático edificio de finales del siglo XIX situado en el Campo Volantín, pasó a pertenecer a la cadena navarra hotelera Luze, dejando de ser propiedad de la Autoridad Portuaria de Bilbao tras 70 años.

Durante este tiempo, la entidad que gestiona el Puerto de Bilbao lo ha mantenido y restaurado en numerosas ocasiones como la joya arquitectónica que es. Con su venta, la última cesión que el Puerto ha realizado a Bilbao, se cierra una etapa que comenzó con el traspaso de terrenos, muelles, una parte de la lámina de agua y ahora, el Palacio.

Edificio con 130 años de historia

Los orígenes del inmueble se remontan a 1894, cuando el arquitecto Julián de Zubizarreta y Usatorre ubicó la residencia del matrimonio formado por José María de Olabarri y Massino y Manuela Zubiria e Ybarra, en un punto emblemático del Paseo del Campo Volantín bilbaíno, y que, posteriormente pasaría a ser sede de la Autoridad Portuaria de Bilbao

Las obras de este ‘hotel’- término de origen francés que fue empleado con frecuencia en las casas construidas en el último tercio del siglo XIX - finalizaron el 2 de abril de 1897. El matrimonio Olabarri se trasladó entonces junto con sus 5 hijos y un gran número de personal de servicio. Pocos años después, el propio Olabarri encargó al mismo arquitecto un proyecto de ampliación del sector de servicio en la zona zaguera de la vivienda

Cesión gratuita de terrenos

Para contribuir a la expansión y a la regeneración de los municipios ribereños, la Autoridad Portuaria ha realizado en las últimas décadas un importante esfuerzo inversor con el fin de crear nuevas superficies en el Abra Exterior y poder así trasladar primero a las empresas de Abandoibarra, y después a las que operaban en el Canal de Deusto, permitiendo, de este modo, la regeneración urbanística de Zorrotzaurre.

Paralelamente, la entidad ha llevado a cabo un procedimiento de cesión gratuita a los respectivos ayuntamientos ribereños de determinados espacios pertenecientes al dominio público portuario, vinculados netamente con la interacción puerto-ciudad, y previamente declarados innecesarios para el desarrollo de los usos y la explotación portuaria. 

Una de las últimas actuaciones del Puerto incluye el proyecto de Zorrotzaurre.

Así, durante las últimas décadas, la Autoridad Portuaria ha venido cediendo gratuitamente superficies portuarias a localidades como Sestao (superficie del polideportivo de la Benedicta y urbanización anexa), Getxo (zona de la Campa del Loro, que incluye una zona ajardinada con columpios, mobiliario urbano y un pequeño aparcamiento público), Portugalete (piscinas del muelle Churruca), Leioa (carretera de la Vega de Lamiako) o Bilbao (paseos de ambas márgenes de la Ría o del área de Abandoibarra),

Precisamente, la última cesión se realizó en la villa en diciembre de 2022, cuando la Autoridad Portuaria cedió al consistorio bilbaíno una parcela del barrio de Olabeaga. Esta comprende gran parte del paseo ribereño que conecta la zona del botxo con el vecino barrio de Zorrotza, una superficie aproximada de unos 22.000 m2. Como condición para el traspaso, el Puerto exigió que su destino futuro mantuviera su actual uso de utilidad pública e interés social como vial rodado terrestre, paseo, parque y zonas recreativas infantiles y para adultos.

De este modo, el Ayuntamiento de Bilbao podrá dar continuidad a las actuaciones que viene desarrollando para la recuperación y puesta en uso de los espacios incluidos en el denominado ‘Plan de Choque de Punta Zorrotza’, y su conexión con el centro urbano a través del barrio de Olabeaga.