Orduña, en Bizkaia; Villalba de Losa, en Burgos, y Amurrio, en Araba. Tres consistorios unidos por una misma causa: destacar el interés cultural del monumento a la Virgen de La Antigua con el objeto de recuperar su estado arquitectónico y escultórico y devolverle, así, su esplendor, importancia, valor emocional y de promoción turística. Construido a lo largo de 1904, a 933 metros de altitud en el monte Txarlazo, pero en terrenos del municipio burgalés, la imponente estructura de hormigón armado de 25 metros de altura fue inaugurada el 16 de octubre de ese mismo año. Más de un siglo después, y con solo dos intervenciones importantes de mantenimiento y restauración –realizadas en 1951 y en 1975– la situación actual del monumento levantado en honor a la patrona de la ciudad vizcaina es preocupante, hasta el punto de que tuvo que ser vallado y cerrado al público en julio de 2021 por motivos de seguridad.

Así queda reflejado en el detallado informe encargado por los tres ayuntamientos y que detalla, como principal causa de su deterioro la “corrosión de las armaduras inducidas por carbonatación del hormigón y alta exposición a la humedad” que ha producido “daños en revestimientos exteriores al estar expuestos a ciclos de hielo, deshielo, lluvia, calor, etc”. El plan de acción, elaborado para revertir esta situación incide en cuatro aspectos y todas las actuaciones contempladas para la recuperación del monumento y su entorno están cuantificadas en 1,5 millones de euros.

Exterior e interior

Para rehabilitar y proteger la estructura exterior será necesaria la limpieza y eliminación de morteros mal adheridos, la reposición de las zonas en mal estado con morteros de revestimiento, la reconstrucción de la figura de la virgen y, para finalizar, aplicar un tratamiento de impermeabilización exterior total. También se plantea reparar y proteger tanto las escaleras como el cono invertido además de intervenir en la sala de copa, en la rotonda interior y en la capilla.

El plan incide, además, en aspectos del entorno del monumento y aconseja desmontar y volver a montar el muro del pedestal, el rejunteo del muro perimetral del pedestal y la reparación de solados, peldaños, gradas y barandilla metálica. En cuanto a los servicios existentes o que deberían existir en ese complejo cultural se incide en la necesidad de mejorar la instalación eléctrica y de iluminación además de implantar ventilación y un sistema contraincendios, colocar un pararrayos e instalar mecanismos de videovigilancia, telecomunicaciones y control de accesos.

Y “tras el diagnóstico de la situación actual y la redacción del proyecto, el siguiente paso será comenzar con las obras de reforma”, informan desde el Consistorio orduñés, aunque sin precisar cuál podría ser la fecha aproximada de inicio para hacer realidad ese demandado proyecto de recuperación del monumento a la Virgen de La Antigua, un elemento patrimonial considerado singular y único y, sobre todo, un icono para la ciudad de Orduña.

Plan de actuación

Exterior. Limpieza y eliminación de morteros mal adheridos, reposición de las zonas en mal estado con morteros de revestimiento, reconstrucción de la figura de la Virgen y, para finalizar, aplicar un tratamiento e impermeabilización exterior total.

Interior. Reparar y proteger tanto las escaleras como el cono invertido además de intervenir en la sala de copa, en la rotonda interior y en la capilla.

Entorno. Reparar muros, peldaños, gradas y barandillas metálicas.

Otros. También hay que mejorar la electricidad e iluminación e instalar pararrayos y sistemas contraincendios, de control de accesos y vigilancia.