El aumento de la temperatura superficial del mar ha provocado profundas transformaciones en las comunidades de macroalgas que ponen en peligro algunas de las funciones ecológicas de estos organismos, según un estudio de la UPV/EHU que ha analizado durante 40 años los cambios registrados en un zona de la costa de Bizkaia. Las especies de algas de “afinidad fría” están siendo reemplazadas gradualmente en la costa vizcaina por especies pequeñas de afinidad cálida, lo que hace peligrar algunas de sus funciones ecológicas, como servir de refugio y hábitat para gran variedad de organismos marinos.
El estudio, elaborado por el Grupo de Investigación Bentos Marino de la UPV/EHU junto con el Centro de Investigación Avanzada de Blanes (Girona), expone que el calentamiento del mar es más notorio en la costa vasca que en otros lugares, ya que se ha producido un aumento de la temperatura de 0,23 grados centígrados por década, frente a un aumento de 0,15 grados centígrados a escala mundial. Ante esta situación, los investigadores han estudiado cómo ha afectado el calentamiento a las comunidades de macroalgas de una zona costera de Bizkaia, a diferentes profundidades, durante las últimas cuatro décadas.
“Es importante estudiar cómo responden las comunidades de macroalgas ante los incrementos de temperatura, de cara a la conservación de la biodiversidad marina, ya que desempeñan roles fundamentales en los ecosistemas”, explicaba la bióloga Olatz Arriaga Telleria. “No hemos detectado otras especies que sustituyan estas importantes funciones ecológicas a medida que se van reduciendo las especies estructurantes, lo cual supone una degradación de las comunidades”, añadió. Aunque la resiliencia mostrada por las macroalgas suscita cierta esperanza, el equipo investigador subraya que no parece que el control de la temperatura del mar vaya a llegar de forma inmediata, por lo que no ven un “futuro fácil”.