El Servicio de Igualdad del Ayuntamiento de Santurtzi ofreció atención psicológica a un total de 74 mujeres a lo largo del pasado año. Asimismo, el servicio de asesoramiento jurídico recibió un total de 205 consultas formuladas por mujeres. “Estos datos evidencian la realidad en la que vivimos pero que también visibilizan el problema público que nos afecta a todos y todas”, señaló Ixone Andreu, edil de Acción Social del Ayuntamiento de Santurtzi.

Una parte muy importante de las mujeres atendidas por el servicio de atención psicológica ofrecido por el Consistorio marinero, fueron víctimas de violencia de género. “Generalmente se atiende a las mujeres derivadas por la trabajadora social del servicio, con el fin de paliar en lo posible las consecuencias psicológicas de la violencia sufrida, así como proporcionar a las mujeres las herramientas psicológicas necesarias para su recuperación personal y social”, destacó Andreu. Para todo ello, este servicio ofrece dos tipos de sesiones, unas en las que se da un tratamiento individualizado, mientras que las otras son sesiones grupales. “La finalidad de estas sesiones es garantizar a las mujeres que han sufrido o están sufriendo violencia machista una asistencia psicológica urgente, gratuita y especializada, en un marco de proximidad y accesibilidad”, indicó Andreu. En lo que respecta, expresamente, a las sesiones grupales, son unas actividades que se ofrecen a las mujeres que acuden a este servicio, que han tomado parte con anterioridad en las sesiones individuales y que cumplen una serie de requisitos. “Podemos decir que, tras los momentos iniciales del taller y las primeras dinámicas, se ha dado un clima de confianza y cohesión grupal entre las integrantes del grupo con el acompañamiento de la psicóloga”, precisó Andreu.

Por su parte, a lo largo del pasado año fueron 205 las solicitudes que recibió el Servicio de Igualdad del Consistorio marinero para ofrecer asesoramiento jurídico a las mujeres. Este servicio busca ayudar a las usuarias a la hora de conocer los derechos que las asisten. Todo ello, para arropar a las mujeres de la localidad marinera que se encuentran en una mayor situación de vulnerabilidad.