Una cría de foca ha visitado por sorpresa la localidad vizcaina de Lekeitio por Navidad. El animal marino ha despertado una gran expectación entre las personas que estos días se han acercado por los arenales de Isuntza y Karraspio, respectivamente. El animal fue visto por primera vez en Nochebuena y ayer martes recaló en la playa de Karraspio.

Ibon Pérez, vecino de Lekeitio se llevó una sorpresa cuando, según cuenta, estando de poteo con sus amigos vio al animal varado en la playa buscando un lugar donde pasar la noche. "Cuando lo vi me pareció un regalo de Navidad. Lo mismo que llega se suelen ir. No es la primera vez que suelen llegar este tipo de animales a las playas vizcainas", explica Ibon Pérez, vecino de la localidad costera a DEIA.

Pero, sin embargo, no fue así. Tras pasar la noche en la playa la pequeña foca gris, el día de Navidad, también se dejó ver en la playa de Isuntza. "La pobre se metía en el agua y luego volvía a la arena. Se le veía asustada y desorientada", añade. En esta época es habitual la visita de focas. La semana pasada otro ejemplar fue visto en la playa de Gorliz y hace dos semanas otra foca llegó hasta la localidad de Ondarroa.

DISTANCIA DE SEGURIDAD

En el caso de la foca de Lekeitio es un ejemplar común de color gris procedente del Hemisferio norte que, al parecer, podría haberse perdido y que ha llegado a parar desorientada hasta aguas de Lekeitio. A pesar de que los expertos recomiendan no acercarse a ellas ya que pueden morder Ibon critica que la gente "no respeta la distancia de seguridad".

La foca que ha llegado a Lekeitio es de color gris procedente del Hemisferio norte I. Pérez

Lo cierto es que, tal y como explica Ibon, el animal marino el día de Navidad no presentaba ningua herida y este martes, cuando la rescataron presentaba una herida que podría ser provocada por la mordedura de un perro o por una red con la que se enganchó. "La gente se acerca demasiado sin ser conscientes de que el animal se puede sentir amenazado y terminar mordiendo. Hay padres y madres que dejan que sus hijos se aproximen demasiado. Tampoco es lógico que los dueños de perros dejen que se acerque al animal", recuerda Ibon Pérez, quien ha hecho estos días un seguimiento del animal.

En este sentido, el vecino de Lekeitio lamenta que el animal marino haya estado demasiados días "dando vueltas" y expuesta ante el ir y venir constante de curiosos que no "la han dejado tranquila". "En Navidad no tenía ninguna herida. La he ido vigilando y estaba en perfecto estado. Este martes la pobre tenía una agujero", lamenta el lekeitiarra.

La Ertzaintza acordonó la zona el martes por la mañana para proteger al animal y evitar que pudiese provocar algún daño a las cientos de personas que se fueron acercando por Karraspio, como si de una procesión de Semana Santa, para ver a la cría de foca. "Hay gente que se pensaba que estabámos en Cabárceno", añade molesto.

Finalmente, ya por la tarde, los responsables del centro de recuperación de Fauna de Gorliz rescataron a la cría de foca para curarle la herida que presentaba. "Espero que esté bien y puedan devolverla pronto a la mar", concluye el vecino de Lekeitio.