Las pistas de pádel de San Pelayo ya lucen su nueva y colorida moqueta azul, que sustituyen a la verde de origen cuando se inauguró el espacio deportivo en 2015. En una actuación que ha requerido de una inversión de 17.000 euros, el área de deportes de la administración local ha sustituido esta semana la moqueta de las pistas municipales. “El nuevo tapiz es de la marca Mondo, en concreto el modelo Supercourt XN, material oficial que se utiliza en el World Padel Tour. Su color es azulón –azul Bilbao o añil– frente al verde inicial con el que se abrió la instalación en el año 2015 y presentaba signos de desgaste por el uso”, explicaron responsables municipales.
En cuanto a las características del nuevo césped instalado, “se trata de un césped monofilamento texturizado de última generación, que garantiza uniformidad y homogeneidad en el bote. Gracias a la combinación de dos tipos de monofilamentos texturizados, cada uno de ellos con diferentes espesores y anchuras, permite crear una nueva combinación de césped que ofrece una gran resistencia al desgaste, mejora la capacidad de recuperación de los filamentos y reduce el desgaste que se produce por la fricción de la arena, ya que requiere una menor carga de arena”, apuntaron desde el Ayuntamiento de Ermua añadiendo que “la nueva combinación de filamentos texturizados mejora la capacidad de recuperación de los filamentos, manteniendo la capacidad de resistencia a la tracción rotacional y lineal (Grip), el bote angulado y vertical de la pelota”.
Desgaste
En cuanto a las razones que han motivado el cambio de la moqueta de las pistas municipales ubicadas en San Pelayo, desde el Consistorio lo atribuyeron al desgaste por el paso del tiempo y del uso que presentaba la pista anterior.
Los trabajos de renovación se llevaron cabo la semana pasada y desde el miércoles, 29 de noviembre, se restableció el servicio. Desde ese día, los usuarios pueden utilizar la instalación con normalidad, tal y como se hacía hasta la renovación. En lo económico, reemplazar las moquetas ha supuesto a las arcas municipales de un desembolso de 17.000 euros.
