El Gobierno vasco, a través de su dirección de Puertos y Asuntos Marítimos, ha puesto en marcha el plan para que los muelles de la zona comercial del puerto de Bermeo dispongan de nueva iluminación. En concreto, el ejecutivo de Lakua destinará 1,1 millones de euros –IVA incluido– en unos trabajos –cuyo plazo de ejecución es de cuatro meses– para que la dársena pueda operar con comodidad y, sobre todo, con mayor seguridad, incluso aunque se haga de noche.

Los pliegos para la contratación, que aún está abierta, apuntan que la operatividad del puerto comercial bermeotarra no es la más idónea. Y es que, “con el paso del tiempo las torres de iluminación de los distintos muelles se han ido deteriorando tanto en el aspecto mecánico como lumínico”, según apuntan. Y es que las torres, que “disponen de un sistema de izado y descenso de la corona donde se encuentran los proyectores”, están actualmente “inutilizados y no es posible realizar el mantenimiento adecuado de los proyectores, quedando estos totalmente inutilizados”. Es por ello que esta situación motiva que la mejora de la iluminación –y su equipamiento– resulte necesaria.

Al no poder realizar este mantenimiento de los proyectores, “la iluminación necesaria para realizar las tareas propias del puerto, va siendo escasa y por esta situación” se ha decidido actuar. Así, Lakua mejorará además la instalación de electricidad en baja tensión para la alimentación a ocho torres de alumbrado con proyectores led, al igual que se renovarán tres cuadros eléctricos y se remozarán instalaciones complementarias como los cableados, las cimentaciones, las canalizaciones o las protecciones.

A principios de 2019, el área comercial del puerto de Bermeo fue objeto de profundas mejoras, especialmente gracias a los trabajos para solventar los daños generados por los temporales marítimos y el uso propio de las instalaciones. Dividido en varios lotes, con el principal, cuyo coste de adjudicación fue de 1,8 millones de euros, permitió reparar y reforzar el muelle de Xixili, en alrededor de 140 metros de longitud. Entonces se reparó la estructura y se mejoró la pavimentación de la zona de almacenamiento, para así adaptarla a las nuevas necesidades del puerto. También se completó la reposición de servicios afectados y se realizó una nueva red de drenaje de los muelles comerciales, “para conseguir una estética acorde al emplazamiento”. Además, se invirtieron otros 1,2 millones para ejecutar mejoras en el muelle de Erroxape, en un tramo de alrededor de 130 metros de longitud.