Bermeo y Mundaka fueron ayer los primeros municipios que han aplicado las restricciones recomendadas por el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia (CABB) el jueves y decidieron suspender los servicios de riego de jardines y calles. En Bermeo solo se utilizará la máquina limpiadora a presión para limpiezas puntuales y urgentes hasta nuevo aviso y su alcaldesa pidió al CABB permiso para poder utilizar la toma no potable de Gernika para seguir limpiando las calles del municipio.

Bermeo, al igual que Mundaka, también ha colgado en sus calles bandos en los que pide a la ciudadanía que no llene sus piscinas ni riegue los jardines.

Precisamente, en esta época del año aumenta el consumo de agua en la comarca, y al mismo tiempo llueve menos. Por ello, en un comunicado el teniente de alcalde de Bermeo, Xabier Ortuzar, destacó ayer que “en esta situación de alerta toca actuar con responsabilidad al Ayuntamiento, a las empresas y a la ciudadanía”.

“Nosotros, como Ayuntamiento, estamos en ello. De hecho, pedimos que se aumente la coordinación entre los pueblos de Busturialdea y el Consorcio de Aguas para poder anticiparnos a este tipo de situaciones”, emplazó a la entidad que abastece de agua a casi toda Bizkaia.

Por su parte, el CABB no prevé la activación del buque cisterna que traslade agua potable desde Santurtzi hasta la comarca de Busturialdea al menos hasta mediados de septiembre, y eso en caso de que sea necesario por la continuación las próximas semanas de un clima seco y sin lluvia.

La alcaldesa de Mundaka, Sorne Rubio, indicó ayer en una entrevista radiofónica que el CABB le ha comunicado que el barco cisterna ha iniciado ya las tareas de limpieza de sus depósitos, por si fuese necesaria su utilización.

Hasta tomar esa medida, que el pasado verano supuso el traslado de más de 103 millones de litros de agua, el CABB tiene aún en cartera otras medidas para contener el consumo y que el escaso caudal que baja por los ríos de la comarca pueda ser suficiente.