El Ayuntamiento durangarra firmaba hace unos días el acta para el arranque de las obras de la última fase del vial Urki Hegoalde, una variante que permitirá completar el anillo exterior de Durango reduciendo el tráfico por el centro de la localidad y permitiendo el desarrollo del nuevo polo industrial de Eguzkitza. Las obras cuentan con una inversión de 3.438.168 euros, lo que supone la mayor inversión de los últimos doce años en la localidad.

Esta última fase permitirá culminar el proyecto para unir el barrio durangarra de Tabira con la rotonda de Montorreta en la que se encuentran la empresa Ona y el supermercado Alcampo. El plazo máximo de ejecución de los trabajos será de 18 meses, por lo que concluirán a finales del próximo año 2024.

Con este nuevo vial los vehículos podrán transitar desde Abadiño hasta la N-623 sin tener que pasar por el centro de la localidad, no así los camiones, que deberán seguir transitando por la variante entre Iurreta y Durango.

Asimismo, este nuevo vial ayudará a descender el tráfico rodado por el núcleo urbano, haciendo desaparecer uno de los mayores conflictos viarios que suceden en Durango, exactamente entre la calle Faustebidea y la rotonda de Gernikako Arbola.

El desarrollo de esta nueva carretera impulsará el sector industrial de Eguzkitza, facilitando a las empresas implantarse al otro lado del polígono de Astola, en Abadiño, y posibilitando, a su vez, la creación de empleo para Durango y la comarca.

La inversión inicial correrá a cargo del consistorio durangarra, aunque después esa cantidad se recuperará a través de las cargas de urbanización que deberán abonar los futuros propietarios de los terrenos.

PROYECTO PLURIANUAL

La construcción de esta variante es uno de los proyectos más importantes que se inició hace diez años con el gobierno del PNV. Ese mismo año se abrió la primera fase, pero debido a la carestía de las obras, se decidió ejecutar en fases. Así, hasta el momento se han construido tres y la última, cuyas obras comenzaron hace unos días, posibilitará sacar a centenares de vehículos que diariamente atraviesan la localidad por la calle Larrasoloeta.