Coincidiendo con el segundo aniversario de la celebración de la primera consulta popular en la villa, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Durango ha dado a conocer su proyecto para convertir el antiguo trazado del tren en una vía verde. Un anuncio que llega semanas después de que Eusko Trenbide Sarea (ETS) aprobase la innecesariedad del tramo ferroviario, pero que no podrá comenzar a ejecutarse hasta que el Consejo de Gobierno de Lakua ratifique la cesión realizada por ETS al Ayuntamiento de Durango. “Seguimos trabajando para recuperar el antiguo trazado y cerrar esa cicatriz que aún perdura en la superficie de Durango. Tenemos el dinero y tenemos el proyecto, una vez que ETS ha dado el primer paso, ahora solo queda que el Gobierno vasco autorice el proceso y podamos empezar los trabajos para comenzar a disfrutar de una nueva vía verde”, explicaron responsables municipales.

Un carril bici sustituirá a las antiguas vías. AYTO. DURANGO

Cuando eso suceda el consistorio durangarra podrá comenzar las obras que le permitirán recuperar el antiguo recorrido que cuenta con una longitud aproximada de 905 metros lineales con una superficie de 7.487 metros cuadrados, la cual discurre por la calle Trenbide hacia el este y llega paralelo a la calle Montevideo hasta el límite con Abadiño. En concreto, las dos primeras fases que se abordarían corresponden al tramo de la calle Trenbide hasta Ermodo y el de Olleria hasta el límite con Abadiño. En este sentido, el proyecto contempla que el primer ramal conserve las catenarias de las antiguas vías, transformándolas en elementos de iluminación, en un guiño al paso del tren por la superficie de la localidad.

Otro de los elementos más característicos de la actuación será la transformación del puente metálico sobre el río Mañari en un paso peatonal, para lo que la administración local deberá también solicitar el permiso correspondiente a URA y actuar una vez que lo obtenga. Pese a ello, desde el equipo de gobierno se mostraron optimistas asegurando que “después de tantos años y tanta espera, estamos muy cerca de cerrar la cicatriz que aún hoy en día sigue dividiendo en dos a Durango. El acuerdo alcanzado con el Gobierno Vasco para el PERI nos ha permitido que el Gobierno vasco nos ceda el trazado. Las y los durangueses han apostado por dejar atrás las cinco torres de 18 pisos y mirar al futuro desde una perspectiva sostenible y saludable, lo que, sin duda, este proyecto ayudará a conseguirlo”.

Presentadas las infografías, el anteproyecto se ha nutrido de las aportaciones que el ayuntamiento impulsó años atrás tras un proceso participativo con los centros escolares. Así, los trabajos prevén la reconversión de dicha vía en un paseo y en zonas de esparcimiento entre las que destacan la adecuación de un anfiteatro a la altura de Landako Gunea o la reconversión del puente metálico de la calle Trenbide en una pasarela para viandantes.

La recuperación del trazado fue uno de los puntos que el equipo de gobierno y el Departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes del Gobierno vasco acordaron en diciembre de 2021.