El ultimo tramo de encauzamiento en acometer URA se inició a finales de 2020 y se esperaba que concluyera antes de finalizar el presente ejercicio pero no será posible por la fuerte resistencia del lecho rocoso, la cual demorará varios meses el proyecto.
A este obstáculo geológico también se añade otros condicionantes de las obras, como la creación no prevista de una nueva acera a lo largo de un tramo de la carretera colindante cercana al barrio de Arkotxa, y los periodos de intensas lluvias que en el invierno pasado impidieron trabajar a las máquinas en el fondo del río durante varios días.
Todos estos añadidos supondrán que el coste final que la Agencia Vasca del Agua tendrá que pagar a la contrata Viuda de Sainz alcance los 12,5 millones de euros en lugar de los 9,1 por los que fueron adjudicados en un inicio.
El tajo discurre desde la pequeña presa o azud de Bengoetxe hasta el puente de Plazakoetxe, otro kilómetro y medio que ha tenido como elemento distintivo duplicar la anchura del cauce a la altura del puente de Mercadillo.
En total, se ha pasado de los 40 metros iniciales que salvaba el viejo puente de Mercadillo a los 80 metros generados con la creación de un nuevo canal para evitar demoler el centenario paso protegido por su carácter histórico.
EL APUNTE
Secular y moderno. La joya de toda la operación ha sido la reconversión del protegido puente de Bengoetxe en un nuevo paso que mantiene la vieja estructura y suma una extensión que supera el ensanchamiento del cauce.
Restauración comparada. La restauración del puente se ha acometido notándose a propósito la diferencia para que quede claro qué es original y cuál el remate moderno, que lo que hace además es proteger la estructura original.
El resto del cauce natural se está excavando en su lecho para alcanzar en algunos tramos los 2,5 metros de profundidad añadida. Todo ello debido a que las orillas del Ibaizabal en este tramo están tan ocupadas por pabellones, industrias y edificios de viviendas que no se ha podido ir a una solución de gran expansión en los laterales del río. La única opción para ganar capacidad era rebajar el fondo del Ibaizabal. Como complemento a esta medida, y para limpiar lo máximo posible las orillas de construcciones que invadían la zona inundable, se han tenido que demoler algunas viviendas en la orilla izquierda, ubicadas en el municipio de Zaratamo, varios restos de empresas abandonadas en la derecha y el frontón de Santa Barbara en Galdakao que se asomaba sobre una curva del río en Zuhatzu. En total, seis construcciones. Además se ha regenerado a nivel vegetal las orillas talando grandes ejemplares de árboles que habían crecido sin control y plantando especies autóctonas que secularmente han crecido en las orillas de la vertiente cantábrica.
En los meses de tajo que restan habrá que derribar parte de un vial que ocupa la orilla izquierda y está pegado al campo de fútbol de Santa Barbara, para proseguir hasta alcanzar el puente de Plazakoetxe el cual será recalzado y se procederá a derribar la parte del parque colindante que se enseñorea sobre el cauce. Cuando finalice esta III fase se habrán extraido la escalofriante cifra de 190.000 m³ de roca y tierras, el equivalente a la carga de 19.000 camiones.
