En los momentos donde la pandemia golpeaba con más fuerza en 2020, Ibarretxe Kultur Etxea acogió los Laboral Kutxa DEIA Hemendik Sariak con la idea de agradecer la labor más humana de personas, entidades y asociaciones de Durangaldea. Tras la edición del pasado año en el Zornotza Aretoa, la cita vuelve al espacio cultural iurretarra con el propósito fundamental de ensalzar el compromiso y la dedicación por seguir creciendo como comarca. En esta decimoquinta cita (jueves 6 de octubre, a las 19.00 horas) se entregarán un total de nueve reconocimientos.

Entre los premiados hay dos muy ligados al municipio anfitrión: José Miguel Cerezo y Heki Herri Kirol Taldea. En todos los municipios hay personas que se entregan en cuerpo y alma a un club a cambio de nada. No son muchos los que ejercen esta labor impagable dejando huella allí donde están. Esto es lo que ocurre con José Miguel Cerezo y su Iurretako Kirol Taldea (IKT). No en vano, este hombre fue uno de los fundadores de la entidad en 1980 y el primer presidente. Ahora, tras estar ligado al club todos estos años, la temporada pasada le hicieron presidente honorífico del club. “Me gusta pasar tiempo en el campo; estoy aquí para echar una mano en lo que haga falta”, asegura a sus 75 años. 

La trayectoria de Miguel Cerezo en el Iurretako Kirol Taldea será reconocida con uno de los nueve Hemendik Sariak que se entregarán

Cerezo también es conocido ya que trabajó durante más de veinte años de taxista en el municipio. En este sentido, durante muchos años llevaba al colegio a los más pequeños del municipio que vivían en los barrios o tenían problemas de movilidad. Apasionado del balón, Cerezo formaba parte de una cuadrilla de 14 amigos que solía participar en diferentes campeonatos de la zona. En ella ejercía, sobre todo, labores de entrenador y un día decidieron juntarse y crear un club. “Entrenábamos en una campa del polígono de Arriandi donde tuvimos que llevar unos pinos de San Juan para poner las luces”, recuerda con nostalgia Cerezo. Otro de los hitos del club se materializó con la llegada del campo de fútbol propio. Tras pasar varias temporadas en Berriz y el campo de Garaizar, el Iurretako inauguró Larrakozelaia. Agradecido por el reconocimiento, Cerezo afirma que “es un orgullo ver cómo aquello que fundamos un grupo de amigos se ha convertido en lo que es hoy; un gran club”. 

El segundo reconocimiento que se quedará en casa será para Heki Herri Kirol Taldea. La pasión por el deporte rural de Jon Iñaki Etxano fue decisiva para su puesta en marcha en el municipio en 2012. “Fui tirador en un equipo de sokatira de Mutriku durante ocho años y hacíamos exhibiciones de deporte rural. Cuando vine a vivir a Iurreta, vi que no se hacía nada y decidí empezar a enseñar a los más jóvenes”, explica el responsable de la entidad.

Natural de Ondarroa, Jon Iñaki se acuerda de todos los jóvenes y sus padres con los que disfruta cada vez que organiza alguna prueba. Además, pretende programar diferentes jornadas con asociaciones como la de mujeres de Iurreta Anderebide y GeuBe, de Durango. “Es una práctica minoritaria y lo que quiero es que no se pierda algo tan tradicional y nuestro. Estoy orgulloso de que haya sido yo el que haya animado a los jóvenes a practicarlo en Durangaldea”, defiende ilusionado de seguir a sus 61 años. 

El próximo jueves, 6 de octubre, Ibarretxe Kultur Etxea de Iurreta acogerá los XV Laboral Kutxa DEIA Hemendik

Un año más, la cultura jugará un papel fundamental en la XV edición de los Laboral Kutxa DEIA Hemendik Sariak. Dentro de este apartado se encuentra el txistulari berriztarra Germán Aldekoa y su trayectoria en San Lorentzo Dantza Taldea. Fundado en 1952 por el maestro de danza Alejandro Aldekoa, padre de Germán, el grupo lo conforman alrededor de 40 dantzaris, entre niños y mayores, y dos txistularis, que son Germán y su hermano Jon. “Aita nos enseñó a tocar el txistu; era muy buen profesor. Recuerdo que con 7 años ya empecé a tocar el txistu y con 14 a bailar. Las dantzas y el txistu siempre han estado presentes en nuestras vidas”, comenta con cariño Germán, a sus 69 años. 

Coincidiendo con el 70 aniversario, en plenas fiestas del barrio, San Lorentzo Dantza Taldea quiso conmemorar el pasado mes de agosto la fecha con una amplia y sentida programación. Uno de los actos principales fue el pasacalles con salida desde la casa donde vivió el fundador de la entidad, Alejandro Aldekoa, hasta la ermita donde tuvo lugar la misa. Fue en julio de 1952 cuando Alejandro Aldekoa y varios aficionados a las dantzas decidieron juntarse con el propósito de fundar un grupo. La idea era bailar en las siguientes fiestas del barrio y presentar oficialmente a los dantzaris y la agrupación. Dicho y hecho. Un mes antes del día de San Lorenzo se pusieron a aprender y lograron su acometido. “Se juntaron un grupo de jóvenes para calentar las piernas y lo consiguieron”, asegura entre risas el txistulari.

Hasta el año pasado, Germán también ha sido el txistulari oficial del Ayuntamiento de Berriz. Tomó el relevo cuando falleció su padre en 1997. “Durante 25 años he sido el txistulari oficial de Berriz con mucho orgullo. Este reconocimiento de DEIA también me hace mucha ilusión”, apunta Germán Aldekoa.

El txistulari German Aldekoa, la cofradía Aitte Kurutze de Abadiño y el garaitarra Lazaro Milikua destacarán en el apartado cultural

Siguiendo con la tradición como bandera, mención especial también para la cofradía Aitte Kurutze de Abadiño. Y es que a raíz de la reparación de la ermita del barrio Zelaieta hace un año y medio, surgió la idea de fundar la cofradía. Para hacer frente a los gastos de la obra, las donaciones jugaron un papel fundamental y la respuesta vecinal fue positiva. Fue hace seis meses cuando la cofradía tomó forma en el barrio. “La ermita es de 1666 y de generación en generación se ha trasladado ese sentimiento especial por ella. En un homenaje de cariño y gratitud a nuestros antepasados, restauramos esta ermita colocando una nueva cubierta e instalando placas solares que la iluminen permanentemente para que siga ofreciendo amparo y recogimiento a quien lo necesite”, explica José Vizcarra, integrante de la cofradía a sus 74 años.

Una de las grandes novedades de este año ha sido la recuperación de las fiestas de Aitte Kurutze donde se sacaron unas boinas y pañuelos para dar a conocer la cofradía y conmemorar los festejos con actividades para todos los públicos. En la actualidad, la recién estrenada cofradía la conforman 35 socios que pasan por la ermita convertida en punto de encuentro para charlar e ir estructurando la nueva agrupación. “Todos tenemos que arrimar el hombro para poder mantener nuestras costumbres. Lo que queremos dejar muy claro es que toda la gente que quiera puede participar con nosotros. Vamos a formalizar la cofradía y pensaremos en diferentes actividades que podamos ir haciendo. Queremos que la cofradía tenga vida”, adelantan sus integrantes. 

Continuando con las tradiciones, entre las características de las sociedades modernas están la fragmentación de la identidad o el fin del compromiso mutuo. Sin embargo, cualquier pueblo que se precie, que quiera vivir y existir en este mundo cambiante necesita conocer y transmitir sus raíces. En este apartado podría ensalzarse la figura de otro de los premiados: Lazaro Milikua. Este garaitarra ha trabajado recopilando cientos de nombres de lugar en el proyecto de la toponimia del municipio que le vio crecer. Su labor por la historia también ha dejado huella ya que ha trabajado durante décadas, y lo sigue haciendo, en la asociación Gerediaga Elkartea, en innumerables actividades que han ayudado a revitalizar la lengua y la cultura vasca en Durangaldea. “Sin relaciones humanas no podría vivir y siempre he luchado por todo lo euskaldun y nuestras tradiciones”, reconoce con orgullo.

Su faceta como secretario en los Ayuntamientos de Garai y Berriz también calaron en ambas instituciones trabajando desde los años 70 hasta que se jubiló hace ocho. “Recuerdo que entré en el Ayuntamiento en la época de Franco; trabajaba los fines de semana y no se cobraba”, apunta el hoy concejal en Garai. 

También es conocida su labor dentro de la Asociación de Perros Pastor de Euskal Herria y su inestimable ayuda en la organización de innumerables campeonatos que buscan dar a conocer y preservar una raza autóctona en peligro de desaparición. Su compromiso social lo une con la comunidad cristiana de Garai y con su impulso a Garaiko San Miguel Nagusien Elkartea, amén de su participación en innumerables iniciativas y actividades que pretenden poner en valor el patrimonio cultural. “Es un reconocimiento a lo que he hecho a lo largo de la vida y estoy muy agradecido. Llevo más de cuarenta años en todas las organizaciones y acontecimientos de Durangaldea y siempre es bonito que valoren lo que uno ha hecho”, cuenta. 

El Betigol CD Zornotza de fútbol sala femenino comenzó en la temporada 2016-2017 a competir de manera federada

Como viene siendo habitual, el deporte estará muy presente en los XV Laboral Kutxa DEIA Hemendik Sariak de este año. Todo comenzó con una conversación entre unas madres de la ikastola. Todas coincidían en que el deporte que más les motivaba era el fútbol y que de pequeñas no habían tenido la oportunidad de practicarlo. Y, ¿por qué no ahora?, se preguntaron en 2014. “Lo demás parece que vino solo o parece que había más mujeres esperando a que alguien arrancase. Se juntaron unas cuantas y empezaron a entrenar por su cuenta, en la calle, con lluvia y todo. Pedían a amigos o conocidos que les entrenasen; unos iban y otros venían. Los contrincantes eran grupos de niñas y niños que jugaban ahí. Y así poco a poco las ganas de competir les animó a crear un club oficial e inscribirse en la Liga Territorial Vasca de Fútbol Sala Femenino”, explican las integrantes del conjunto zornotzarra Betigol, que recibirán otro de los reconocimientos.

Los inicios, en lo que a resultados se refiere, no fueron los más alentadores. Aunque era lo de menos, en la temporada 2016-2017, los resultados “la verdad es que fueron desastrosos; entraban goles por todos los lados”, reconocen las jugadoras. Poco a poco se empezó a escuchar Betigol en Amorebieta y se fueron uniendo cada vez más mujeres. Así, entre todas y junto con un cuerpo técnico fijo, llegaron a consolidar al Betigol que son hoy en día: un equipo competitivo que recientemente ha ganado un torneo de pretemporada contra los equipos más fuertes de su liga.

La filosofía que marca las bases del Betigol es la del “respeto entre compañeras y con las contrincantes; porque esto último también les llega a las que vienen detrás”. Para esta temporada, las jugadoras de Betigol se han marcado el objetivo de terminar entre las mejores de la Liga y seguir fomentando la práctica del fútbol sala. Las representantes de la entidad se muestran muy agradecidas por ser premiadas en los XV Laboral Kutxa DEIA Hemendik Sariak Durangaldea, ya que “significa un reconocimiento a las mujeres futbolistas de la comarca en general, a todas, porque somos muchas. Y para Betigol un agradecimiento por reconocer su labor; porque hacer entender que es posible ser mujer, trabajadora, madre y competir en una Liga de fútbol no ha sido un camino fácil, porque a día de hoy todavía parece que el fútbol tiene una edad límite en las mujeres. No es así y lo estamos demostrando”. 

Una tienda con encanto

Esta decimoquinta edición de los premios entregará de nuevo un reconocimiento al pequeño comercio y su cercanía en el día a día. Y es que hay tiendas que están intrínsecamente ligadas a la historia de un pueblo. Es lo que ocurre con Japi Moda, una tienda con encanto, que lleva 26 años en Elorrio dedicándose a vestir a sus clientes. La eibarresa Ana Larrea Bergaretxe es la responsable de un negocio en el que “además de salir con alguna prenda, los clientes se van con el estado de ánimo y la autoestima más alta”, asegura Ana.

El trabajo y la cercanía del pequeño comercio se verá reflejado en el reconocimiento a Japi Moda de Elorrio

Ubicada en Kanpokale, Japi ofrece ropa para mujer y hombre con una amplia variedad de complementos y calzado. Antes de superar la dureza de la pandemia tuvieron que hacer frente a su peor momento hace cuatro años. “Se nos incendió la tienda y tuvimos que cerrar para reparar todo el destrozo. Tuvimos el coraje de volver a abrir y seguir trabajando con la ilusión de siempre”, comenta Ana que demuestra con sus palabras las ganas que tiene de seguir atendiendo y aconsejando a sus clientas. 

Como todo buen comercio local, Japi preserva los valores de la confianza y un trato personal y cercano, lo que le ha permitido mantener una clientela fiel que de Elorrio, de la comarca, Bilbao, Arrasate o Eibar. “Agradecemos la confianza depositada en nosotras y seguiremos mimando a nuestra clientela”, aseguran desde el comercio elorriarra. 

SARIAK

  • José Miguel Cerezo fue uno de los fundadores del Iurretako Kirol Taldea en los años 80 y desde entonces sigue ligado a la entidad de Larrakozelaia.
  • Heki Herri Kirol Taldea lleva desde el año 2012 impulsando el deporte rural en Iurreta y en la comarca. 
  • German Aldekoa ha sido txistulari oficial del Ayuntamiento de Berriz durante el último cuarto de siglo.
  • Cofradía Aitte Kurutze lleva medio año afincada en el barrio abadiñarra de Zelaieta.
  • Lazaro Milikua y su dedicación toda una vida defendiendo las tradiciones en Garai y en Durangaldea.
  • Betigol CD Zornotza y su defensa y pasión por el fútbol sala femenino.
  • Japi Moda y su labor incansable durante 26 años en la villa Elorrio.
  • Zornotza Saskibaloi Taldeai por el título de Copa en LEB Plata de la pasada temporada.
  • Zaldua Saskibaloi Taldea y el gran trabajo que está realizando su equipo femenino.