Tres investigadoras africanas disfrutarán este curso de una beca para desarrollar sus proyectos en centros de excelencia del territorio, dentro del programa Ellas investigan de la Fundación Mujeres por África, en colaboración con la Diputación foral. Con ellas, ya son quince las mujeres del continente que han participado en esta iniciativa en Bizkaia y que siguen impulsando el cambio de vuelta en sus países de orígenes en Sudán, Uganda, Túnez, Ghana o Argelia. “Son investigadoras que aspiran a ser protagonistas de la transición de África hacia un continente basado en el conocimiento y guiado por la innovación”, ha destacado María Teresa Fernández de la Vega, presidenta de la fundación.

Ehimwenma Sheena Omoregie, de Nigeria, y Moshera Samy Abd ElAziz Youssef, de Egipto, son dos de las tres científicas que desarrollarán sus estancias posdoctorales, durante seis meses, en Bizkaia. La primera lo hará Biocruces, buscando medios alternativos para hacer frente a la propagación de infecciones microbianas resistentes, mientras que la segunda, en Deustotech, quiere mejorar los fármacos contra el cáncer mediante el uso de polímeros y nanopartículas.

Los objetivos del programa, “buque insignia de la fundación” según ha explicado Fernández de la Vega, son incrementar el número de científicas africanas, así como sus competencias y liderazgo, y fomentar la cooperación científica y el intercambio de experiencias. “Cuando planteé el programa fue recibido con escepticismo, no creían que en África pudiera haber investigadoras que estuvieran a la altura de los centros de excelencia españoles. Pero yo lo tuve claro desde el principio, lo sabía desde mi época de vicepresidenta del Gobierno”, ha destacado la ahora presidenta de la fundación. “Siempre he podido contar con el enorme talento, compromiso y liderazgo de las mujeres africanas”.

Fernández de La Vega ha destacado asimismo el “mérito extraordinario” de unas mujeres “excepcionales”. “Es dificilísimo ser investigador en España y muchísimo más en África”, ha incidido, subrayando también la contribución que realizan, a su vuelta, en sus países de orígenes. “Todas han vuelto a sus países para transferir conocimiento a sus equipos, ninguna se queda a aprender y a hacer negocios. Muchas son ya decanas y profesoras titulares de sus universidades, han publicado artículos en prestigiosas revistas internacionales y han presentado sus trabajos en conferencias científicas internacionales. Son un grupo de élite en el ámbito de la investigación”. Incluso han creado, ha añadido, una red llamada Now is Africa que “está cambiando la percepción que se tiene del continente africano”.

Nuevas formas de cooperación

Por su parte, la diputada de Empleo, Inclusión Social e Igualdad, Teresa Laespada, ha enmarcado esta colaboración con la fundación dentro de la estrategia Bizkaia Koopera, de apoyo a la cooperación internacional. “Esto también es cooperación e innovación social, y forma parte de lo que tenemos que construir”, ha destacado la responsable de la institución foral que, dentro del programa, ha creado la red de centros de investigación que acoge a las científicas y se hace cargo de la dotación económica para las estancias. 

“Tienen ganas de colaborar y de configurar redes en investigación con África y se hace con mujeres, que son las que menos posibilidades tienen de salir de sus países”, ha puesto en valor el trabajo de las investigadoras. “La mujer es motor de cambio en África; ellas nos demuestran que allí hay desarrollo, conocimiento y feminismo. Y a la vuelta a sus países llevan todo ese conocimiento ampliado”.

Quince investigadoras desde 2014

Desde que en 2014 la Diputación se unió al programa Ellas Investigan, son ya quince las científicas africanas que han desarrollado su labor en Bizkaia, en los campos de la salud y la biomedicina; la energía, el agua y el cambio climático, y la agricultura y la seguridad alimentaria. Procedentes de Egipto, Sudán, Uganda, Túnez, Nigeria, Ghana, Togo y Argelia, han trabajado durante seis meses en el Instituto de Investigación Sanitaria Biocruces Bizkaia, el Instituto Tecnológico Deustotech y el Instituto de Investigación en Servicios de Salud Kronikgune. En todo el Estado, las investigadoras que han disfrutado de estas becas sobrepasan ya el centenar.