Las instalaciones de Astola se encuentran inmersas en días intensos de trabajo para su puesta a punto. Desde hace semanas se trabaja a destajo para que todo esté listo en el primer trimestre del año que viene. A las obras para cambiar el sistema de calderas que comenzaron hace unos meses, se le suman ahora las grúas que posibilitarán que las piscinas en unos meses puedan reabrirse con una nueva cubierta. Tras la adjudicación de las obras el pasado mes de junio por valor de 1,2 millones de euros más IVA, hace unos días comenzaron los trabajos para construir la nueva cubierta de las piscinas de Astola. Tras mucho meses, el Ayuntamiento local ha conseguido dar luz verde a un contrato que posibilitará la reapertura de dichas instalaciones, previsiblemente en el primer trimestre de 2023.
“Después de un trabajo previo intenso y superando circunstancias adversas, hemos entrado en una nueva fase en la que esperamos reabrir unas nuevas instalaciones en Astola para el primer trimestre del año que viene”, adelantaba ayer MIÉRCOLES el alcalde abadiñarra, Mikel Garaizabal. No ha sido un proceso fácil. Se trata de la segunda ocasión que la administración abadiñarra se veía obligada a licitar las obras de construcción de la envolvente del vaso y la banda exterior, la playa de las piscinas, tras la renuncia de la anterior empresa adjudicataria en noviembre del año pasado.
Un hecho que obligó al Ayuntamiento de Abadiño a penalizar a la empresa con el 3% del presupuesto base de licitación, 31.898,48 euros, tal y como exigía el artículo 150.2 de la Ley 9/2017 de contratos del Sector Público. Un dinero que fue depositado en las cuentas municipales a finales del año pasado.
Así las cosas, la obra salió de nuevo a concurso a principios de este año al que se presentaron un total de cuatro empresas. Finalmente ganó la propuesta de la empresa Construcciones Olabarri, por un importe de 1.462.311 euros. Para sufragar estas obras, la administración abadiñarra cuenta con una subvención de 500.000 euros de la Diputación Foral de Bizkaia, con cargo a la última convocatoria de ayudas para instalaciones deportivas en la que ha conseguido la máxima puntuación. Además, el pasado 13 de mayo, se notificó al Ayuntamiento una segunda subvención por importe de 349.766 euros, con cargo a fondos europeos Feder para proyectos de eficiencia energética.
Si todo marcha según lo previsto la obra para restaurar la cubierta que será de madera laminada e integrada en el entorno, deberá estar lista para los primeros meses del año que viene, ya que cuenta con un tiempo estimado de seis meses para ejecutar el proyecto.
A las obras de la nueva cubierta que comenzaron hace unos días, se le suman el cambio de las calderas de las piscinas.
En corto
Cubierta. Tras la adjudicación de las obras el pasado mes de junio por valor de 1,2 millones de euros más IVA, hace unos días comenzaron los trabajos para construir la nueva cubierta.
Calderas. Las obras de la cubierta coinciden con las del cambio de caldera de las piscinas. Estas comenzaron el junio y según los técnicos municipales avanzan a buen ritmo. Fue el año pasado cuando el Ayuntamiento aprobaba una modificación presupuestaria por importe de 465.244 euros para llevar a cabo esta actuación. En noviembre del año pasado se adjudicó el contrato a la empresa Giroa por importe de 355.655,80 euros más IVA.
Fases. El proyecto incluye varias actuaciones que entrarán en servicio de forma paulatina, en fase de pruebas, ya que los ajustes definitivos deberán esperar a la construcción de la nueva envolvente.
