Más de mil casos de ausencia no justificada en menores tutelados en Bizkaia
El diputado de Acción Social, Sergio Murillo, ha detallado que el 70% de las ausencias se resuelven "en menos de 24 horas"
A lo largo de 2021, en Bizkaia se registraron 1.186 casos de ausencia no justificada en menores tutelados, llegandose a formalizar como denuncia 356. Estos datos los ha aportado este lunes en la comisión de Acción Social de las Juntas Generales de Bizkaia el diputado Sergio Murillo.
En la comisión se ha abordado la situación de los menores tutelados tras la petición del grupo Mixto-PP Bizkaia de que el diputado foral de Acción Social de Bizkaia, Sergio Murillo, explicase los "presuntos casos de prostitución de menores tuteladas" por la Diputación foral de Bizkaia que está investigando la Fiscalía, tras varias denuncias.
Ante la petición, Murillo ha comparecido sin dar detalle alguno llamando a la “mesura y la prudencia” ya que se trata, según indicó, de cuestiones que se encuentran en un proceso de investigación y que pueden “aumentar el daño por la exposición pública de estos menores que son especialmente vulnerables”.
"UN GRUPO MUY REDUCIDO"
Sin embargo, tras la solicitud por parte del grupo Mixto-PP Bizkaia para conocer “el número de menores tutelados "que se han escapado de sus centros en los últimos cinco años”, Murillo ha informado que durante 2021 la Diputación puso en conocimiento de la policía autonómica 1.186 casos de ausencia no justificada, de los que 356 se formalizaron como denuncia, las cuales corresponden a un "grupo muy reducido que concentran una gran parte de denuncias”.
Así mismo, ha señalado que el 70% de las ausencias se resuelven "en menos de 24 horas, sin interposición de denuncia". Murillo ha informado también de que al cierre del año pasado, había 2.397 expedientes de protección abiertos de otros tantos menores, de los que 1.091 incluían una medida de guarda o tutela".
En cuanto a lo que desde el departamento llaman "ausencias no justificadas", Murillo ha explicado que el protocolo se activa con la Ertzaintza cada vez que un menor no acude a una cita programada, una ausencia que pasa a ser denuncia si el menor no aparece en 24 horas.