Otra vez la pandemia volverá a estar muy presente en esta nueva edición del Open House. El festival que abre las puertas de edificios emblemáticos y que tanto gusta a la ciudadanía vizcaina regresa a mediados de este mes. Lo hará con el propósito de devolver al urbanismo y a la arquitectura al epicentro de la vida y, de paso, reflexionar sobre el futuro de las ciudades como agentes clave en la mejora de la salud y el bienestar de las personas principalmente, pero también de la flora y fauna urbanita que tantas veces pasa desapercibida, incluso para las personas viandantes.

La ciudad saludable será el título del certamenLa ciudad saludable de este año -días 16 y 17 de octubre- y sobre el mismo girarán las actividades que darán vida a esta iniciativa. La nueva realidad derivada de la pandemia ha puesto de manifiesto la necesidad de repensar calles y barrios y sobre todo, sus usos; también la importancia de crear espacios verdes de proximidad en los que la población pueda compartir momentos, sin olvidar los espacios multiusos e inclusivos.

"Las ciudades están evolucionando hacia modelos más inclusivos, seguros y sostenibles, con las personas en el centro del diseño, facilitando estilos de vida saludables y fomentando la práctica de actividad física y los desplazamientos a pie o en bicicleta", resumen desde el Consistorio bilbaino. En la pasada edición, y por primera vez, se incorporaron al programa las visitas a diferentes espacios públicos de la ciudad, y tras la buena acogida este año se seleccionarán y visitarán nuevos espacios, ilustraban desde el equipo organizador de este evento.

Cambios

El objetivo es transmitir conocimientos que redunden en cambios en el estilo de vida y consumo. Así, serán analizados desde distintas perspectivas y experiencias conceptos básicos y decisivos (infraestructura verde, resiliencia urbana, usos sociales y movilidad saludable...) para que las ciudades puedan plantar cara con garantías a la actual crisis sanitaria y social, pero también a otras como la climática, por ejemplo. Tal y como avanzan los promotores de este certamen, también se pondrán en valor obras y proyectos que muestren una conciencia ecológica en su diseño y construcción incorporando cuestiones como la autosuficiencia energética y los materiales sostenibles.

El objetivo "es promover el pensamiento crítico en relación a cómo utilizamos, nos movemos y nos relacionamos en el espacio público con el fin de aportar conocimiento, conciencia e impulsar un proceso de reflexión colectiva sobre la ciudad, sus espacios, plazas y calles", precisan los organizadores. Con esas premisas, se ha diseñado un amplio programa en el que destacará la apertura de una selección de espacios y obras arquitectónicas -tanto edificios como espacios públicos-, así como la promoción de actividades arquitectónico-culturales especializadas y dirigidas a un público amplio y diverso.

Este año, además, se incorporará al programa el formato Visitas de autor, que brindará la posibilidad de conocer proyectos y espacios de primera mano, con los propios diseñadores que ofrecerán explicaciones sobre sus obras. La cantidad de espacios, el tamaño de los grupos -así como la necesidad o no de inscripción previa en visitas y actividades- dependerá de la evolución de la situación sanitaria, pero se garantizará en todo momento el cumplimiento de los requisitos de seguridad requeridos, enfatizaron los coordinadores de este programa.

Inscripciones

En todo caso, se establecerán grupos controlados y nadie podrá acceder a ninguna instalación sin la compañía de la persona voluntaria correspondiente. El año pasado, y a pesar de la excepcional situación, hasta 350 personas participaron como voluntarias en él. Toda aquella persona que quiera hacerlo en la edición de este año ya puede inscribirse a través de la página www.openhousebilbao.org. Además, y para cualquier consulta o aclaración en relación con el programa de voluntariado, puede contactar a través del correo electrónico boluntario@openhousebilbao.org, informan desde el equipo organizador de esta iniciativa.