Miles de hosteleros se manifestaron ayer por las calles de Bilbao para mostrar su rechazo frontal al cerrojazo del sector decretado por el Gobierno vasco. La medida, que entró en vigor ayer, el día en el que más contagios se registraron en Euskadi, se mantendrá en vigor hasta nueva orden. Por ello, ante la perspectiva de tener que mantener la persiana de sus negocios bajada sine die, los hosteleros protagonizaron una protesta que se hizo extensiva a numerosos municipios vizcainos. Durante la manifestación en la capital, que partió desde la plaza Moyua y finalizó ante el Consistorio, reivindicaron ayudas urgentes bajo el lema SOS Ostalaritza.

"Cuantificamos lo que tenían que ser las ayudas, pero con la decisión del jueves la cantidad tendría que ser mayor. La interlocución existe, pero más allá de eso se necesita concreción. Creo que las instituciones son conscientes de que tienen que dar un paso adelante porque se necesitan ayudas ya", aseguró ayer Héctor Sánchez, gerente de la Asociación de Hosteleros de Bizkaia, en declaraciones a la Cadena Ser. De esa forma, apostó por que se compense "no solo este cierre sino toda la actividad limitada de los últimos meses, para poder mantener vivas el mayor número de empresas y de puestos de trabajo". Además, de cara a la Navidad confió en que se pueda trabajar "no ya al 100%, pero sí en un porcentaje importante para tener oxígeno, aunque va a ser difícil".

Teniendo en cuenta que hostelería y comercio van de la mano, Jorge Aio, gerente de la asociación de comerciantes BilbaoCentro, también se manifestó sobre esta situación que, a su juicio, les afecta: "El comercio está unido a la hostelería y si está cerrada, el efecto va a ser doble, económico y social, el consumo va a ser menos y no va a haber vida en la calle". Además, evidenció que el cierre perimetral de las localidades también les perjudica, ya que los comercios de la capital viven, en buena medida, de los vizcainos que acuden a Bilbao a hacer sus compras. En cuanto a la campaña navideña, que concentra el 30% de las ventas anuales, expuso que "se va ver muy tocada, hay dudas sobre la posibilidad de reuniones familiares, va a ser muy duro. Veremos paulatinos cierres de comercios. La cuesta de enero va a ser de verdad".

GMv2_fin|pTipoComp=fotos&pIdGaleria=5fa6f05d7792ed000a1fa2e7|GMv2_fin LÍNEA DE FINANCIACIÓN

Por la tarde, fuentes del Ejecutivo vasco indicaron que el martes el Consejo de Gobierno aprobará por vía urgente varias medidas específicas para el sector hostelero. Así, las ayudas directas se incrementarán hasta los 45 millones de euros a la vez que se dará forma a una línea de financiación específica a través de Elkargi por valor de otros 100 millones. Así mismo, para agilizar la tramitación de estas ayudas, Lakua creará una Unidad de gestión urgente Covid-19, que se encargará de que las ayudas lleguen antes de fin de año.

Mientras tanto, los partidos vascos de la oposición criticaron ayer las medidas de ayuda al considerarlas "insuficientes". En declaraciones a Radio Euskadi, Leixuri Arrizabalaga, parlamentaria del PNV, destacó que el "plan de resistencia" planteado por el Ejecutivo asciende a 45 millones, ya que "hay que responder a las reivindicaciones de las asociaciones".