- La situación creada por la pandemia del covid-19 ha hecho saltar todas las alarmas en los responsables municipales quienes anticipan una importante caída de los ingresos, tanto ordinarios como extraordinarios, para el presente ejercicio e incluso para 2021 como consecuencia de la alteración productiva que se ha generado desde la declaración del decreto de alarma a mediados del pasado mes de marzo. Un hecho que ha llevado a municipios como el de Ortuella, gobernado en coalición por PNV y PSE-EE, a replantearse las prioridades de su plan de inversiones para este ejercicio postergando algunas obras cuya ejecución global podía rondar los 600.000 euros.

No es el caso de la culminación de las medidas de accesibilidad entre el grupo de la Sagrada Familia y los históricos barrios de Golifar y La Ralera que en breve se materializará con la construcción de una rampa que facilite el acceso universal a la pasarela que salva las vías en la parada más concurrida del tren de cercanías de Renfe. "Con la situación derivada de la pandemia cuyo alcance aún no podemos prever y ante la responsabilidad de poner por delante la atención a las personas afectadas por el covid-19, hemos decidido que proyectos como el skate park, el aparcamiento de Mendialde, la reparación de fachadas, la creación de rutas de monte y algunos otros se hayan paralizado momentáneamente", explicó el alcalde de Ortuella, Saulo Nebreda, quien no obstante aseguró que aún así "hay proyectos estratégicos que no podemos desatender como es el caso de la conexión peatonal con la pasarela que salva la trinchera del tren de cercanías".

En este sentido, Nebreda recordó que en octubre del pasado año se puso en funcionamiento el ascensor que desde el lado de los barrios de Golifar y de La Ralera permite acceder a la rampa que sobrevuela las vías hasta el paseo de la Sagrada Familia. Una obra que tuvo un coste cercano a los 110.000 euros. "Sin embargo quedaba pendiente una segunda fase que es la que ahora pretendemos llevar a cabo con la ejecución de la rampa", aseguró Nebreda.

La obra para instalar la rampa en la pasarela de Sagrada Familia está ya adjudicada y se espera que pueda dar comienzo en julio con un plazo de ejecución de unos dos meses y un coste para las arcas públicas de unos 30.000 euros. "Se trata de una obra muy demandada por los vecinos y vecinas de Ortuella, y necesaria para poder garantizar la accesibilidad universal y la conexión con los barrios de Golifar y de La Ralera pero también con la zona de Las balsas o el polígono industrial Granada", remarcó Nebreda. No obstante, según detalló el concejal de Urbanismo, Óscar Salicio, la rampa que se pretende poner en marcha tendrá carácter provisional debido a que existe un plan presentado por la empresa pública estatal ADIF (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) para acometer la renovación integral de la estación de Sagrada Familia. "Es un proyecto de unos 3 millones de inversión que incluye un ascensor con dos paradas que suplirá a la rampa, pero no podemos esperar para lograr la accesibilidad en la zona ya que es previsible que con el covid la obra se retrase", explicó Salicio.