Basauri - El Ayuntamiento de Basauri aprobó ayer, definitivamente en el pleno municipal el nuevo convenio a firmar con el Gobierno vasco por el cual se construirán 345 viviendas de protección oficial en Azbarren. Como ya se anunciara recientemente, se apostará fuertemente por el alquiler dentro de esta promoción de viviendas. En este sentido, la mayoría de ellas, hasta un total de 265, se pondrán a disposición de la ciudadanía en régimen de alquiler. Además habrá hasta 24 alojamientos dotacionales. "De esta forma, se modifica el convenio suscrito en el año 2004 por ambas instituciones para adaptarse a las nuevas necesidades del municipio, en el que se demanda más vivienda de alquiler", explican responsables municipales. De cara a poder acceder a estas nuevas viviendas en la zona de Azbarren, también se ha anunciado que los basauritarras tendrán preferencia en la adjudicación de viviendas. Por otra parte, "existe la posibilidad de reservar alguna de estas viviendas para actuaciones urbanísticas municipales". Todavía se desconocen los plazos exactos de construcción. Lo que sí adelantan, en base al nuevo convenio, es que uno de los cambios introducidos supondrá que el plazo de construcción de las VPO se reduzca. Así, según aclaran responsables municipales, las 345 viviendas se construirán en dos fases, y la puesta en marcha de ambas estará espaciada en el tiempo "en un máximo de dos años", y no en ocho como se había propuesto en un principio.

16% de la demanda Las 265 viviendas de alquiler rondan el 16% del total de las 1.645 personas que formulan su demanda de vivienda en régimen de alquiler en Basauri. Y es que, "conforme a la información que obra en el Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda del Gobierno vasco, en Basauri hay 2.078 personas demandantes de vivienda", de las cuales 1.645 quieren un alquiler. Se prima esta modalidad, a pesar de que "las viviendas de protección oficial recogidas en el documento suscrito en 2004 para Azbarren, se planteaban en régimen de compra". En este sentido, "los cambios sociales han ido transformando también las preferencias de los demandantes de viviendas, que se inclinan en su mayoría por el alquiler y las instituciones tenemos que ir adaptándonos también a esa nueva corriente social e intentar darle respuesta", indican. Así, "la promoción de 245 viviendas de alquiler protegido y 24 alojamientos dotacionales es una actuación social con grandes dificultades para llevar a cabo en el mercado, por lo que necesita el impulso institucional".