DENTRO de la amplia variedad paisajística de Bizkaia, las cimas de las montañas Artxanda y Ganguren permiten divisar la inmensidad de terreno que abarca la comarca de Txorierri, con un paraje en el que destaca la presencia de lo rural y agrícola, así como construcciones relativamente novedosas como las instalaciones deportivas del Athletic Club, en Lezama, o el aeropuerto de Loiu. No obstante, los municipios que conforman su territorio cuentan con muchos otros atractivos, especialmente, las personas y las asociaciones que hacen que las localidades mantengan su vida en el día a día. Vista la labor de la ciudadanía, el próximo miércoles, 4 de diciembre, el salón de actos del Hotel Loiu, situado en el centro del municipio, será el escenario de la XII edición de los Laboral Kutxa DEIA Hemendik Sariak de la comarca. Un acto que arrancará a las 20.00 horas y servirá de homenaje para un total de trece individualidades, equipos y asociaciones que verán premiada su buena voluntad.
Como no podía ser de otra en una comarca vizcaina, el mundo del deporte cuenta con un especial protagonismo en la zona de Txorierri. Arroeta Mendi Taldea, el club de montaña de Zamudio, vivirá una jornada muy especial, ya que recibirá uno de los premios del evento como reconocimiento a los 15 años que lleva movilizando a la ciudadanía de su municipio. “Siempre ha habido una gran tradición y afición en el pueblo por ir al monte. Hubo un vecino que se encargaba de organizar diferentes salidas y excursiones, fue entonces cuando vimos que un municipio como Zamudio necesitaba un club de montaña. Una vez cumplido todo el procedimiento burocrático que implica la creación de una entidad como esta, nos lanzamos a la aventura en el año 2004”, explica Iñigo Apoita, presidente del club. A lo largo de su extensa trayectoria, Arroeta trata de movilizar a la ciudadanía por medio de varias actividades montañeras prácticamente cada mes. Asimismo, se encargan de la organización de eventos de renombre como el Sasimartxo.
En la comarca tiene peso el deporte, pero sin ninguna duda también lo tiene la solidaridad. Un claro ejemplo es el Banco de Alimentos de Lezama, con Mariasun Oleagordia al frente y con la indispensable colaboración de Bego Intxaurbe, así como de otros hombros que siempre están dispuestos a arrimarse como los de la asociación de jubilados. Entre todos, así como junto a los técnicos municipales y trabajadores sociales implicados, consiguen que “unas once o doce personas” de la localidad puedan recibir comida. Son las manos de buen corazón. Mariasun, desde siempre vinculada a nobles causas, no lo dudó cuando el Banco de Alimentos abrió esta sucursal en Lezama. “Me enteré en una reunión de la parroquia, el cura dijo que hacían falta voluntarios para repartir y coordinarse con los Servicios Sociales. Al día siguiente, fui al Ayuntamiento a ofrecerme”, recuerda esta mujer que lleva años trabajando para los demás porque ya lo hacía antes con Cáritas. Y así, gracias a vecinos de Lezama de buena fe, los segundos lunes cada dos meses, trabajadores del Ayuntamiento van a Basauri a por comida y luego, los jueves, las manos solidarias de Mariasun y Bego la reparten.
El mundo de la agricultura también se muestra como uno de los principales pilares de Txorierri. En ese ámbito la Cooperativa Lorra, cuya sede se sitúa en Lezama, lleva más de 30 años ofreciendo una prestación de servicios técnicos y económicos al sector agroalimentario de Bizkaia. Hoy en día, un total de 34 asociaciones, siete cooperativas y un socio colaborador forman parte de un proyecto completado por cerca de 4.000 productores del territorio. Una gran labor por la que la cooperativa será premiada el miércoles. Enorme es la generosidad de las monjas de la congregación de Nuestra Señora de la Merced de Loiu, que llevan varios años elaborando todo tipo de dulces para su posterior reparto. Su gran trabajo, su sacrificio y la excelente cantidad de los productos que exponen y ofrecen al público son dignas de un reconocimiento. Y la gala de entrega de premios tendrá más nombres femeninos. Los más de 300 socios del Adintsuen Etxea de Zamudio tienen en este local su punto de encuentro, en el que gracias a Maite y Marta pueden pasar muchos grandes momentos. Desde hace siete años, ambas zamudioztarras son las encargadas del bar y la cocina del establecimiento. “Somos amigas desde que teníamos 20 años y hemos estado juntas muchos años trabajando. Allá por 2012, cogimos el Adintsuen Etxea y la verdad es que estamos encantadas. Siendo del pueblo nos da la oportunidad de conocer a mucha gente”, admite Marta.
En juego
Muchísimos son los niños que han pasado por Bizia Kirol Talde, en Lezama. Y es que este club cumple 25 años enseñando los valores del fútbol, en todas sus dimensiones, a los más pequeños. En la actualidad, tiene cinco equipos de fútbol, fútbol 7 y fútbol sala, lo que supone que alrededor de 100 futbolistas txikis forman parte de esta familia. “Para un municipio como Lezama es importante ofrecer la posibilidad de que los niños jueguen al fútbol cerca”, valora Aitor Mugica, que es el secretario de la junta, el coordinador y el entrenador del equipo infantil; vamos, una figura indispensable en Bizia.
Otro de los premiados de la noche serán las personas que están detrás de la organización de los carnavales de Sondika, que han conseguido convertirlos en la fiesta del disfraz más icónica de Txorierri. Este equipo está formado por 16 miembros y Jone Karkamo lleva más de diez años en él. “Lo que intentamos es que la gente del pueblo participe y que haya actividades para todas las edades. Y la verdad es que todo el mundo se involucra: hay muchas cuadrillas en el pasacalles, también en la nagusien etxea lo celebran... Hay mucho trabajo detrás porque nosotros ese fin de semana no paramos: desde el viernes por la mañana empezamos a montar cosas y luego el domingo a recoger todo. Pero lo hacemos a gusto”, señala Jone. Realmente, se merecen un premio.
Aunque pueda sonar a tópico, ciertamente, es una realidad decir que el Colegio Urdaneta es una referencia educativa en Euskadi. Desde 1984, 32 alumnos del centro han obtenido el Premio Extraordinario de Euskadi, otorgado por el Gobierno vasco. Dos de ellos consiguieron posteriormente el Premio Nacional de Bachillerato. Además, el Colegio Urdaneta ha sido el centro de Euskadi cuyos alumnos han obtenido más premios en las Olimpiadas Científicas, que organiza la Universidad el País Vasco (UPV/EHU). Y no solo eso: en el curso 2012-2013, recibió el Sello de Calidad de la Agencia Española y el European Quality Label por la Agencia Europea de E-Twinning-SNA, por el proyecto digital europeo A snapshot of Europe. Siempre a la vanguardia educativa, este centro de Loiu cubre todas las necesidades de aprendizaje en cuanto a edad, además dispone de comedor, servicio de transporte y un club deportivo con 52.000 metros cuadrados de instalaciones. Y hablando de deporte: el Club Deportivo Derio se ha convertido en todo un clásico de la élite regional. Pero el éxito del primer equipo del conjunto derioztarra tiene sus raíces en las categorías inferiores. En total, los equipos cadetes y juveniles del Derio tienen en su haber más de 100 jóvenes que tratan de aprender cada entrenamiento para poder llegar a triunfar algún día. La entidad también cuenta con una sección de fútbol escolar, aunque estos equipos, entre infantiles y prebenjamines, lleven el nombre de Arteaga. Cerca de 200 niños y niñas llevan con orgullo los colores del conjunto de su pueblo. El fútbol femenino también tiene una gran importancia en el Derio, ya que cuenta con tres equipos a día de hoy; el senior, el infantil y el alevín. “Es verdad que tratamos de cuidar mucho este aspecto y nuestra intención es seguir creciendo y poder hacer una plantilla cadete en breve”, adelantan desde la directiva.
La sonrisa en la cara de un niño es una de las cosas más bonitas del mundo. Por desgracia, precisamente en muchas partes del mundo hay demasiados motivos para arrebatar felicidad a los más pequeños. Por suerte, muchas personas se esfuerzan por regalar alegría, calidad de vida y, en el que caso de estas asociaciones de Erandio que recibirán su merecido reconocimiento el próximo miércoles, salud. Ukrania Gaztea, Chernóbil Elkartea y Pro-Sáhara Nishma trabajan para que los niños puedan tener hogares de acogida en verano. Alicia Álvarez, Josebiñe Arana, Mari Mar García y Gurutze Intxaurbe son algunas de las mujeres que con cariño y bondad están detrás de esta buena causa. Por ejemplo, en el colectivo que ayuda a niños y jóvenes de Ucrania, de zonas que sufren las consecuencias del desastre nuclear de Chernóbil, están cinco personas en la junta directiva, que como admite Alicia, ya están “empezando a trabajar en la campaña de 2020”. Y llevan así, desde 2007, cuando el colectivo empezó a andar tras escindirse de una agrupación mayor. Y es que la radioactividad sigue desgastando la salud de la población, por eso, acudir en verano aquí es la mejor medicina. Por ese objetivo se esfuerzan también en Chernóbil Elkartea, una entidad con más de quince años de vida. El pasado verano, trajeron a Erandio, ni más ni menos que a 189 niños. Además, también trabajan con la acogida en navidades, pero esto tiene un carácter más opcional. Gurutze agradece en nombre de todo el equipo, que ronda las diez personas, el reconocimiento otorgado en los XII DEIA Laboral Kutxa Hemendik Sariak, pero sobre todo, “la posibilidad de voz” que aporta el premio para que “Bizkaia y Euskadi nos conozca” y que “se quite el miedo a la acogida” porque en entidades como esta, “siempre estamos necesitados”. Los niños que viven en los campamentos saharauis de Tindouf son los beneficiarios de la labor de la agrupación Nishma, que nació en 2002 y que logra que alrededor de una veintena de niños puedan dejar atrás las temperaturas extremas, la difícil situación, el complicado acceso a medicamentos, etc. y ganar en salud durante los meses de verano. Eso sí, Mari Mar percibe que el número de familias para acoger ha ido reduciéndose, por eso, hace un llamamiento. “Nosotros vamos a seguir trabajando y buscando familias y queremos decirle a la gente que dé una oportunidad a estos niños para que puedan vivir otra realidad”, destaca. Además de con el programa de acogida, esta entidad erandioztarra lleva a cabo otros proyectos como recogida de material para la caravana solidaria.
Muy bonita es la iniciativa de Jesús Sustatxa, presidente de Loiu Laztana, que lleva cerca de diez años recopilando imágenes de los diferentes sucesos y eventos que ocurren en el municipio durante todo el año, para en diciembre entregar un DVD a la ciudadanía. Asimismo, el loiuztarra hace cada año un calendario recopilando imágenes relevantes de cada mes para repartirlo entre la ciudadanía. Sustatxa cuenta con la colaboración de muchos otros vecinos del municipio, además del propio Ayuntamiento.
Buenos corazones
Y el Sáhara estará muy presente en la gala del próximo miércoles. Porque el erandioztarra Jon Salvador, el hombre que corre en las adversidades más extremas, es ya un asiduo al maratón solidario del Sáhara. Para las incansables piernas del atleta, son más de 42 kilómetros de músculo, arena y sol. Para su corazón, son incontables muestras de cariño recibidas, unas buenas dosis de solidaridad repartidas y una experiencia que reclama justicia. Este año ha sido la novena aventura por el desierto para este todoterreno, que el año pasado fue segundo en la carrera, después de tres horas y diez minutos de sudor y esfuerzo soportando unos 30 grados y un fortísimo viento. Pero es que en 2010 fue campeón. Este año ha sido tercero. Por lo que el corredor atesora cinco podios en la prueba saharaui de 42 kilómetros, además de sus dos victorias en la distancia de media maratón. Pero, aparte, Salvador acumula en sus piernas incontables proezas benéficas protagonizadas junto a Javi Conde, en las que demuestran que las barreras están para derribarse. Y es que ha completado junto con su compañero maratones solidarios en sitios tan atípicos como la gabarra del Athletic, el Puente Colgante, la ermita de San Juan de Gaztelugatxe y el interior de la cueva de Pozalagua. Además, el pasado verano, el erandioztarra tomó parte en la novedosa iniciativa del Alironman: una prueba de natación, triatlón y maratón muy bilbaina.
Y este repaso a los premiados llega a su pitido final con el Club Deportivo Sondika. El éxito y la constancia de la escuadra de Basozabal tiene detrás de si un enorme trabajo de personas como José Luis Larrea y Carmelo Gaztañaga, dos directivos del club que han realizado una importante labor por mantener la extensa vida del equipo de su pueblo. El primero de ellos, fue presidente de la entidad durante un periodo cercano de 30 años, mientras que el segundo ha jugado diferentes roles; primero como jugador y, posteriormente, como directivo, trabajando mucho en las labores mantenimiento de las instalaciones deportivas.