BILBAO. El compost que sale de su bolsa de basura orgánica es utilizado en las instalaciones del Athletic en Lezama. Y en el campo de golf de La Arboleda, además de en parques y jardines de muchos municipios. La planta de compostaje de Artigas genera al año 2.900 toneladas de este tipo de abono, que cada vez cuentan con más clientes entre ayuntamientos, mancomunidades y empresas.

Bizkaia separa cada vez más materia orgánica. Esta fracción volvió a incrementarse el año pasado, hasta alcanzar las 10.729 toneladas, una cifra significativa teniendo en cuenta que en 2012, un año después de que instalaran los primeros contenedores, apenas llegó a las 3.400. Sin embargo, el objetivo a medio plazo es llegar a las 25.000 toneladas. La planta de compostaje Bizkaiko Konpostegia, en Artigas, está en pleno proceso de renovación para reducir el tiempo de generación de compost y permitir en el futuro el tratamiento de restos de carne y pescado, si así se decide, para aumentar la producción. La diputada de Sostenibilidad y Medio Natural, Elena Unzueta, anunció esta semana que estudian la posibilidad de habilitar plantas de compostaje comarcales y locales en el territorio.

Bizkaiko Konposta se elabora a partir de los restos orgánicos generados en las cocinas de los hogares del territorio, junto con restos de poda. Tras un proceso controlado, este compost se puede utilizar tanto en agricultura como en jardinería, paisajismo y obra civil. Según los datos facilitados por la Diputación, la planta de Artigas produce actualmente 2.900 toneladas al año de compost: 2.250 fino, que tiene una mejor salida comercial, y 650 grueso.

Los principales clientes son los propios municipios y mancomunidades que llevan sus residuos orgánicos a la planta de compostaje, de forma que se cierra el círculo y el compost vuelve como producto a los lugares donde se produjo el residuo. También se suministra compost a varias empresas de jardinería, que lo utilizan de forma directa o como componente para los distintos productos que comercializan, como abonos. El compost de Bizkaiko Konpostegia se ha utilizado, entre otros lugares, en la recuperación ambiental del parque Etxebarria de Bilbao, el campo de golf de Meaztegi, los campos del Athletic en Lezama y el sellado y recuperación ambiental del vertedero de Berriz.

El número de clientes se ha ido incrementando poco a poco en los últimos años, debido a que cada vez es más conocido. Y es que, tradicionalmente, el compost urbano tiene una imagen de mala calidad. El potencial cliente no tiene, de inicio, una receptividad alta para este tipo de producto. Pese a que los ayuntamientos y mancomunidades cada vez solicitan más compost de esta planta, la Diputación trabaja para concienciar al personal técnico encargado de las obras sobre la importancia de utilizar este material.